DEFINICIONES

Sin agua

No basta con negar la realidad. Cerrar los ojos ante lo evidente, o disfrazar el grave problema, no hará que el panorama sea mejor

OPINIÓN

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Manuel López San Martín / Definiciones / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

Al país lo arrastra una crisis hídrica de pronóstico reservado. La sequía, cruzada con mala planeación, una infraestructura deficiente e incontables fugas, está por provocar una catástrofe para millones de mexicanos que sufrirán –sino es que están sufriendo ya- la falta de agua.

No basta con negar la realidad. Cerrar los ojos ante lo evidente, o disfrazar el grave problema, no hará que el panorama sea mejor. No solo es la CDMX. En prácticamente todo el país, la situación se vuelve cada vez más crítica.

Sobre el nivel de llenado de las 210 principales presas de México, que tienen la capacidad de almacenar 92% del agua de los embalses del país, Conagua dio a conocer que, al 26 de febrero, se ubica en 49%, lo que representa un punto porcentual menos que lo reportado apenas el martes pasado. Está en niveles no vistos para un mes de febrero.

En el Valle de México, el panorama es de alarma. Hay una crisis en el suministro de agua sin precedentes, resultado de varios factores. Unos, responsabilidad de los gobiernos, otros, producto del cambio climático.

Las autoridades no han invertido lo suficiente, y la infraestructura es antigua, obsoleta e ineficiente. La sequía también ha hecho lo suyo: 2023 ha sido el año más seco en todos los registros, según el Servicio Meteorológico. Llovió en el país la mitad de lo que solía llover.

En el Valle de México, por ejemplo, las presas debían cerrar 2023 al 80% de su capacidad, pero lo hicieron debajo del 40%. Al último corte, ayer, el nivel de las presas del Sistema Cutzamala descendió de 38.6% la semana pasada a 38.2% esta. Para ilustrar, Valle de Bravo tiene un almacenamiento de 31.4%, cuando el promedio histórico para estas fechas es de 84%, y Villa Victoria reporta un nivel de 30.5%, en tanto su promedio histórico es de 68.7%. Menos de la mitad. Y no habrá lluvia hasta mayo o junio, cuando quizá sea demasiado tarde.

La viabilidad de la CDMX está en riesgo. Las autoridades han demorado demasiado en emitir una declaratoria de desastre y urgen recursos. No hay dinero suficiente ni en el Sistema de aguas, ni en el gobierno central, mucho menos en las alcaldías.

La sequía extrema del año pasado es un desastre natural; así lo dijo el Servicio Meteorológico en su monitoreo de sequía.

Sería una obligación emitir la declaratoria. ¿por qué no lo hacen?

Las autoridades tendrían que estar en alerta por los bajos niveles en las presas en el sistema Cutzamala, pero, sobre todo, porque eso es botón de muestra de algo más grave: el acuífero está peor. La Ciudad está extrayendo agua a 400 metros de profundidad. Hemos destruido las zonas de recarga: bosques, áreas verdes y laderas. Estamos sobreextrayendo agua.

22 millones de personas que confluyen en el Valle de México sufrirán por falta de agua en los próximos meses. El “día cero” del Cutzamala –cuando no pueda abastecer lo suficiente a la capital- sería el 26 de junio, de acuerdo con el organismo de Cuencas Aguas del Valle de México.

Del presidente López Obrador al jefe de gobierno Martí Batres, pasando por la candidata Clara Brugada, han afirmado que la Ciudad no se quedará sin agua. Ojalá. Aunque los números dicen otra cosa.

POR MANUEL LÓPEZ SAN MARTÍN

M.LOPEZSANMARTIN@GMAIL.COM             

@MLOPEZSANMARTIN

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