ARTE Y CONTEXTO

¡Feliz día del amor!

A veces el sexo está mejor que el amor y si no puedes tener los dos, ¡pues aférrate al que sí puedas alcanzar!

OPINIÓN

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Julen Ladrón de Guevara / Arte y Contexto / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

Mientras escribo esta columna es catorce de febrero… por todo el día. Como no puedo celebrarlo con el “alguien” que me gusta, desde ayer planee quedarme en la cama hasta las 7:00 am para terminar de ver una película inglesa con un agudo sentido del humor negro, pero tembló casi de madrugada y tuve que salir corriendo de mi camita caliente.

La sacudida fue tremenda pero breve; estruendosa y violenta aunque sin consecuencias. Casi se me sale el corazón por la boca pero logré encontrar algo para cubrirme antes de correr desnuda a la calle.

Una vez mi corazón batió normalmente y me encontré “a salvo” sobre el asfalto, descalza y con frío, noté demasiados objetos rojos en la calle: las manteletas de los dos restaurantes de la esquina de mi casa, las flores de una chica dark malencarada que seguramente estaba feliz por su regalo, globos por decenas y demás cosas del amor entregable y tangible, no como el otro.

El otro no se ve pero se siente y tiene la mano muy pesada, el que sea: el amor fraternal, el de una madre, el de los amiguis que van por la vida diciendo “así soy yo”, el del amigobio perdedizo, el friendzoneado o el mío propio, por ejemplo, que ni caso le hago. En fin, hablar del amor e intentar definirlo me da mucha flojera, sobre todo hoy.

De unos años a la fecha tengo ganas de celebrarlo todo (hasta el 14 de febrero) y ser súper feliz ese día especial, pero cuando se acercan las fechas comienzo a ponerme nerviosa porque mis expectativas se reducen a cada segundo que se acerca eso que tanto anhelo.

Mi cumpleaños es el peor de todos, seguido por la navidad, el año nuevo y demás fiestas que duran semanas de regalos, comidas, convivencia con la familia y demás cosas lindas que le pasan a todos menos a mí, por eso ya decidí irme a buscar mercados olvidados en Taipei o Vietnam,hacer videos y volverme youtuber hasta que me muera.

Espero que no falte mucho para eso pero mientras tanto, pensaré en el amor como algo lindo que está ahí; como un ente o un gatito que ya nomás por existir tiene derecho a la vida…. y también al sexo.

El día del amor para muchos comienza el 12 o 13 de febrero en los hoteles de paso con una cena ligerita y algo de alcohol para reírse más fuerte cuando se pierda el asco mutuo; mucho mejor si en el cuarto hay un jacuzzi con burbujas en medio de la nada y luz tenue. Esto me lo contaron, obvio, por eso me largo a Vietnam, pero aun careciendo de experiencia, me parece muy buen plan.

A veces el sexo está mejor que el amor y si no puedes tener los dos, ¡pues aférrate al que sí puedas alcanzar! Además debe ser muy simpático ir a uno de esos lugares llenos de espejos, donde por primera vez puedes verte desde todos tus ángulos mientras te hacen cosas porno.

Es seguro que habrá personas cuya sensibilidad herí sin esfuerzo porque estas palabras les parecerán fuertes; la verdad es que es un plan muy fresa. Todos, TODOS somos más fresas y más reprimidos de lo que creemos, por eso la idea de renovar el amor en un potro sin instrucciones de un hotel de paso del Tlalpan (avenida chilanga famosa por la enorme cantidad de hoteles) de tu localidad puede ser hasta vivificante.

No sé por qué pero eso de hacer planes un día se me vino a la cabeza porque deseaba celebrar con “aquél” el amor desde todas sus aristas (familiares, festivas, cursis, diamantinosas, intelectuales), pero créanle a esta semiamargada, único infalible es el que se involucre al sexo, estés o no estés…

Por ejemplo, puedes comenzar en la cocina con una tremenda y breve sacudida aunque no sea estruendosa. Tal vez un poco violenta pero sin consecuencias, pero eso sí, ¡que al final se te salga el corazón por la boca! Y no te preocupes por cubrirte del frío, con cerrar la ventana es suficiente.

POR JULEN LADRÓN DE GUEVARA

CICLORAMA@HERALDODEMEXICO.COM.MX 

@JULENLDG

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