UNO DE LOS casos judiciales más escabrosos del gobierno de la 4T es el de Segalmex, máxime porque siguen saliendo actos que evidencian el tamaño del robo que realizaron sus principales funcionarios.
Seguridad Alimentaria Mexicana, cuyo objetivo fue ése, garantizar a la población pobre el acceso a bienes básicos de consumo, también merece mención en el nuevo libro de Andrés Manuel López Obrador.
Hace unos días le referimos el caso del Grupo Industrial La Italiana, que tiene como accionistas a Blas Cernicchiaro Schettino, Ida Maimones de Cernicchiaro y José Cernicchiaro Maimones.
Esta empresa proveedora del gobierno de Puebla ha ganado contratos para el suministro de leche entera y descremada en polvo para consumo de sectores vulnerables, amén de desayunos escolares.
Comentamos en este espacio sobre un depósito que realizó a finales de 2022 por varios miles de pesos a Film & Marketing 18K, compañía ligada al ex director de Administración y Finanzas, René Gavira Segreste.
Esa firma fue pieza clave en el desvío de cuantiosos recursos públicos; en 2020, según pesquisas de la Fiscalía General de la República, de Alejandro Gertz Manero, se le detectaron diversos depósitos.
Fueron de diversos proveedores de Diconsa, como son los casos de Summa Company, Molinera de México, Molino Harinero San Blas, Conservas La Costeña, Galletera de Puebla, Minsa y La Italiana.
El monto de los desvíos que hasta ahora la administración de Leonel Cota, relevo del primer director de Segalmex, Ignacio Ovalle, ha logrado documentar, suman entre 350 y 400 millones de pesos.
Film & Marketing 18K es una empresa que controla el hijo de Gavira Segreste, René Federico Gavira Martínez, fue constituida en Guadalajara con una identificación robada y está a punto de ser judicializada.
Entre 2019 y 2020 se benefició de compras consolidadas de Diconsa por más de 3 mil millones de pesos, cuya normatividad establecía que cobraría a los proveedores hasta 3% de la compra facturada.
Ese dinero debía depositarse a las cuentas de la misma Diconsa para el mejoramiento de las tiendas rurales o para la adquisición de flotillas vehiculares de la dependencia.
Pero en lugar de aplicarse a Segalmex, los Gavira, padre e hijo, terminaron desviando ese 3%, estimado en aproximadamente 180 millones de pesos, a las cuentas de su empresa Film & Marketing 18K.
Las indagatorias de Segalmex y la FGR determinaron que las sumas de dinero se utilizaron para la compra de bienes inmuebles en San Antonio, Texas.
A PROPÓSITO DE Segalmex, otra empresa identificada por la Auditoría Superior de la Federación, ésta que lleva David Colmenares, beneficiada de los desfalcos cometidos en la administración de Ignacio Ovalle, es Transportes Esdo, de Jorge Espinosa. Dicha firma fue adjudicada el año pasado por la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuito (Conaliteg), que dirige Victoria Guillén para que distribuyera los polémicos libros que reescribió el gobierno de la 4T.
Pues bien, le informo que el viernes pasado esa misma dependencia le asignó otro contrato para el servicio de transporte y distribución en todo el territorio nacional de los materiales educativos para el ciclo escolar 2024-2025. Se trata de las partidas de la CDMX, Centro, Pacífico y Sur con una oferta de 105 millones de pesos.
CARLOS SLIM HELÚ ofreció ayer su tradicional conferencia de prensa anual. Una de los señalamientos que hizo fue sobre Telmex, que aseguró está quebrada, pero que no la vende porque fue un acuerdo con sus hijos. Y ciertamente la empresa dirigida por Héctor Slim Seade ya no es negocio. Pero lo que sí es Triara, cuyo timón también lleva su sobrino.
Se estima que en lo que va del sexenio, el gobierno de la 4T le ha asignado contratos por la friolera de 10 mil millones de pesos. Se trata de servicios de redes y seguridad de dependencias como el ISSSTE que todavía dirige Pedro Zenteno, las secretarías de Gobernación de Luisa María Alcalde y Educación Pública de Leticia Ramírez y el Banco del Bienestar de Víctor Manuel Lamoyi. La tecnología simplemente evolucionó.
RECIÉN LE PLATICABA del pleito entre la mexicana Manufacturera Plástica Tulti y la poderosa multinacional inglesa ACH Foods, dueña de marcas como Capullo, Karo, Inca, Mazola, Aladino y Twinings. Esta última, que dirige aquí Mario Vallejo, canceló unilateralmente el año pasado un contrato de envasado que llevó a la quiebra a su proveedor.
Tulti fue demandada por daños y perjuicios por cerca de 37 millones de dólares y otros 22.6 millones de pesos también por sus acreedores, a quienes solicitó líneas de crédito para soportar el contrato de ACH. Apunte principalmente al BBVA, de Eduardo Osuna; Santander, de Felipe García Ascencio; Sabadell, de Albert Figueras; Bajío, de Salvador Oñate; Banregio, de Manuel G. Rivero, y Unifin de Rodrigo Lebois.
LA SORPRESIVA POSTULACIÓN de Gustavo de Hoyos como candidato de Movimiento Ciudadano a una diputación, demostró que finalmente fue el partido de Dante Delgado el que apostó por los dirigentes empresariales. El ex presidente de la Coparmex será ahora quien defienda las causas de la IP.
Llevaría como suplente a Manuel Herrera, ex presidente de la Concamin. En la rayita se quedó Bosco de la Vega, ex presidente del Consejo Nacional Agropecuario. Un extra de Gustavo, artífice de la Alianza Va por México del PRI, PAN y PRD, es la interlocución con los liderazgos de las fuerzas opositoras para que los planteamientos que se hagan mantengan una estrategia legislativa y jurídica conjunta.
DURANTE SU TERCER día de gira por España, la candidata de la coalición Fuerza y Corazón por México, Xóchitl Gálvez, se reunió con representantes de empresas con inversiones en México. Apunte a Antonio Huertas, presidente de Mapfre; Miguel Ángel Navarro, mandamás de Catenon; Iñigo Mariscal, dueño de Grupo Marhnos; Enrique Riquelme, cabeza de Cox Abengoa; Alejandro Irarragorri, capitán del Grupo Orlegi, y Ángel García Cordero, timón de SEG y Bodega Finca Sandoval.
POR DARÍO CELIS ESTRADA
COLABORADOR
@DARIOCELISE
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