Hace unos días tomó posesión como la próxima presidenta de México para los siguientes seis años la doctora Claudia Sheinbaum Pardo. El Partido Revolucionario Institucional (PRI) en voz de Rubén Moreira, aliado de Alito Moreno, ofreció que coadyuvará con el reciente gobierno a construir una nueva nación.
El líder del PRI en San Lázaro afirma que es tiempo de darle la vuelta a la página, de dejar pasar el episodio, de “borrón y cuenta nueva”. Es más, ha convocado a la presidenta al diálogo, a la concertación, a los consensos y a que exista un espacio de reflexión.
La oposición integrada por el Partido Acción Nacional (PAN) y Movimiento Ciudadano (MC) deberían de hacer lo mismo, es lo más inteligente, lo más sano. En lo social, ya perdieron la batalla, en lo económico, se han mantenido las variables macroeconómicas en rangos aceptables. En materia de seguridad al parecer las cosas cambiarán con la designación de alguien que si sabe de la materia como es Omar García Harfuch en la secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
García Harfuch contará con una subsecretaría de Inteligencia e Investigación que se encargará de combatir los delitos federales y también del fuero común.
Esta nueva instancia trabajará en un nivel de coordinación con la Guardia Nacional y las secretarías de la Defensa, de Marina y gobiernos estatales. Al parecer, en estos próximos seis años cambiará aquello de “abrazos no balazos”.
El secretario ha sido muy claro en el tema incluso antes de tomar posesión, ha dicho que a la gente no le importa si es un delito del fuero federal o del fuero común, lo que exigen es que se resuelvan los mismos y se castiguen a los infractores.
Al tiempo, Omar García Harfuch es policía, tiene amplios conocimientos y estudios en la materia, vaya, el sí le entiende al tema, sabe que este problema no se arregla con reuniones de gabinete a las seis de la mañana, es un trabajo de 24 horas.
Por estas y muchas razones más, la oposición debe replantearse el papel que ha jugado hasta la fecha, además de buscar mejores cuadros que puedan hacer propuestas inteligentes que convenzan a la ciudadanía.
De no ser así, es fácil predecir que Morena ganará sin problemas el 2030. La presidenta sabe gobernar, sabe hacer política y sabe jalar las riendas en momentos adecuados, así que una oposición que no esté a la altura será blanco fácil como lo fue con López Obrador.
De una vez por todas deben de irse los Marko Cortés, los Alitos Moreno, los Dante Delgado y su gobernador “estrella” Samuel García. No aportan nada, al contrario, demeritan y exhiben a una oposición débil, corrupta y sin ideas.
En materia de política exterior las cosas deberán mejorar paulatinamente. El secretario de Relaciones Exteriores, Juan Ramón de la Fuente, es un hombre de 73 años, sensato, con experiencia.
Juan Ramón fue el representante Permanente de México ante la Organización de las Naciones Unidas de 2019 a 2023. El sabe que esas vaciladas de pausar relaciones son ocurrencias del momento que en nada abonan a una relación sana de nuestro país con las demás naciones.
Juan Ramón de la Fuente y Marcelo Ebrard, secretario de Economía, entienden seguramente la globalización como una eliminación de barreras ideológicas y geográficas que propicia el intercambio no solo de bienes y servicios, sino también de ideas. Al tiempo.
POR EDUARDO MACÍAS GARRIDO
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