El cáncer de próstata es la primera causa de cáncer en hombres y la segunda entre todos los tipos de tumores. Los casos nuevos y la mortalidad son diversos en todo el mundo, incluso muy diferentes en algunas regiones de nuestro país. La situación económica de los países, la raza, la alimentación y la fortaleza de los sistemas de salud impactan en el diagnóstico temprano y en el tratamiento oportuno. En Estados Unidos, su diagnóstico se realiza en un 85 a 90 por ciento en etapas tempranas de la enfermedad, mientras que en México hay menciones de diagnóstico de hasta 70 por ciento en etapas avanzadas.
Las muertes por esta enfermedad suelen ser el resultado de cáncer de próstata invasor y resistente a varios tratamientos de inicio. Históricamente la supervivencia de los hombres con cáncer avanzado es de menos de dos años.
Las tasas de mortalidad en México son muy confiables y actualmente reportan la muerte de 11 por cada 100 mil hombres. En la región de América Latina, México ocupa el segundo lugar después de Brasil, en los casos de quienes viven con la enfermedad.
El Día Mundial del Cáncer de Próstata (11 de febrero) y en México (29 noviembre) son fechas ideales para promocionar y concientizar, para ello, es necesario mantener un esfuerzo con las acciones de detección a través de la prueba (en sangre) del antígeno prostático específico y una exploración física anual a partir de los 40 años si existen antecedentes familiares del padecimiento y, a partir de 45, si no los hay.
En el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se brinda atención integral para el cáncer de próstata. Se cuenta con la intervención de los tres niveles de atención médica, desde el historial, revisiones, consulta con especialistas, estudios, ultrasonidos y biopsias, así como tratamientos o procedimientos quirúrgicos que son aplicados con criterios clínicos validados.
El IMSS ha impulsado la investigación sobre esta enfermedad desde hace varias décadas con el objetivo de proponer las mejores alternativas. La Unidad de Investigación en Epidemiología Clínica en Colima ha realizado importantes estudios, en particular, ha analizado este cáncer desde estudios en laboratorio para probar el efecto de antiinflamatorio para mejorar la sobrevida y la calidad de vida de los enfermos en etapa avanzada.
La evidencia científica generada por la investigación en el IMSS se fortalece cada día con iniciativas, estrategias de atención médica, educación y vinculación. Este es el objetivo central del Programa de Investigación Traslacional “TRASLADA” que capta las necesidades de salud desde la cama del paciente, las analiza en los laboratorios de investigación y genera propuestas de atención para aplicarse en las áreas clínicas.
POR DR. JOSÉ GUZMÁN ESQUIVEL
COORDINADOR DE INVESTIGACIÓN EN SALUD DEL IMSS / UNIDAD DE INVESTIGACIÓN EN EPIDEMIOLOGÍA CLÍNICA DE COLIMA
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