El día de ayer concluyeron las precampañas presidenciales y los sondeos indican que Claudia Sheinbaum lidera con una considerable ventaja frente a sus rivales, Xóchitl Gálvez y el recién incorporado a la contienda, Jorge Álvarez Maynez.
Esta ventaja se basa en la satisfacción con el actual gobierno de la Cuarta Transformación. Además, la clase política actual genera pocas opciones entre la población principalmente por sus propios errores, como lo hizo Marko Cortés, presidente del PAN, quien indignado por los incumplimientos en Coahuila mostró un documento que detalla cómo el PRI y el PAN se distribuyen cargos gubernamentales de manera descarada.
La posición de Marko Cortés es contradictoria, ya que anteriormente criticaba este tipo de prácticas. En un tuit de 2011, se quejaba de la distribución de notarías por Enrique Peña Nieto, calificándolo como “el viejo priista con piel joven”.
Esta ironía la destacó el dirigente de Morena, Mario Delgado, quién señaló que “salieron tan rateros que hasta se roban entre ustedes”. Incluso tras el episodio parece que se sienten orgullosos de lo que revelaron, ya que el secretario de Elecciones del Comité Ejecutivo Nacional del PAN, Armando Tejeda, señaló la existencia de un convenio similar firmado en Durango, y no descartó la posibilidad de que se realicen otros acuerdos similares en las elecciones locales de 2024.
Aquí surge la interrogante sobre qué se repartieron para la elección presidencial, así como para los comicios en los nueve estados. Si bien, dada la actual fortaleza de Morena, es probable que no logren ningún triunfo, sería valioso que, al menos transparentaran sus acuerdos.
Además, le han estado mintiendo a la gente, diciendo que su plataforma era la defensa de la independencia del Poder Judicial, pero, ¿cómo pueden abogar por esa supuesta independencia cuando, en un acuerdo electoral negocian la posición de un magistrado?
También resulta irónico que digan defender organismos autónomos, mientras pactan la designación del Instituto de la Transparencia, por lo que vale la pena preguntarse, ¿qué más se reparten?
Se apropian de las oficinas de recaudación, lo que es una verdadera tragedia para el funcionamiento transparente del sistema fiscal, ¿o para qué querrían controlar una oficina recaudadora?
También se distribuyen las Secretarías de Infraestructura y Obras Públicas, evidentemente para seguir promoviendo el desarrollo inmobiliario en su propio beneficio, como se ha revelado que ocurrió en la Ciudad de México (CDMX).
Incluso asignan direcciones en planteles educativos y en universidades, sin considerar los perfiles o méritos, sino basándose en simples cuotas políticas. El documento expone que el PRI y el PAN buscan llegar al poder sólo con el fin de servirse, no para servir, viendo al pueblo como un negocio.
Para concluir un par de cosas, la primera es que el reclamo de Marko Cortés deja al descubierto que Alito Moreno constantemente lo engaña; y la segunda, que los políticos que gobernaban antes de la llegada de López Obrador son unos verdaderos cínicos.
Es por eso es que, de forma abrumadora los mexicanos están con la Doctora Claudia Sheinbaum, porque no toleran la corrupción del PRIAN, quienes convirtieron al país en un botín.
POR ARTURO ÁVILA ANAYA
ANALISTA POLÍTICO, EXPERTO EN SEGURIDAD NACIONAL HARVARD
@ARTUROAVILA_MX
EEZ