El año 2024 comienza marcando una clara tendencia: la adopción de tecnologías basadas en la nube se erige en la piedra angular del crecimiento y la innovación empresarial.
No obstante, a medida que más empresas trasladan sus operaciones a entornos en la nube, la seguridad se convierte en una preocupación persistente y en constante crecimiento.
¿Cuáles son los desafíos específicos de seguridad que enfrentan las empresas, llevándolas a caer víctimas de brechas de datos? Según Statista, las principales preocupaciones de seguridad en la nube son la pérdida y fuga de datos (69%) y la privacidad/confidencialidad de los datos (66%), seguidas por la exposición accidental de credenciales (44%).
El impulso hacia la nube es innegable, alimentado en parte por la demanda de capacidades de computación excepcionales para impulsar iniciativas empresariales centradas en la inteligencia artificial.
No obstante, esta transición hacia la nube no está exenta de riesgos. Las empresas se enfrentan a una creciente amenaza de ataques a la infraestructura en la nube, lo que complica aún más las operaciones, especialmente para aquellas que dependen en gran medida del trabajo remoto.
Las preocupaciones sobre un probable aumento en los ataques específicos de la nube, diseñados para aprovechar vulnerabilidades y configuraciones incorrectas mediante la automatización, son evidentes.
La automatización, aunque valiosa para la eficiencia operativa, se ha convertido en un arma de elección para los ciberdelincuentes que buscan explotar debilidades en la seguridad de la nube.
Las estadísticas de Statista ofrecen una perspectiva diferente sobre la distribución geográfica de las preocupaciones de seguridad en la nube. El mayor aumento se ha observado en Asia (+60%), seguido de Europa (+50%) y Norteamérica (+28%).
Este panorama refleja la globalización de las amenazas cibernéticas, donde ningún rincón del mundo está exento de ser blanco de ataques cada vez más sofisticados.
La tendencia creciente de los ataques basados en la nube se vincula directamente con el traslado acelerado de las operaciones organizativas a la nube.
Las empresas deben abordar de manera proactiva las vulnerabilidades y debilidades potenciales en sus infraestructuras en la nube, priorizando la seguridad sin comprometer la agilidad y la eficiencia que ofrece este entorno tecnológico.
Es esencial que las organizaciones inviertan en soluciones de seguridad avanzadas y adopten prácticas de ciberseguridad robustas. La concienciación y la formación continua de los empleados sobre las amenazas emergentes en la nube son igualmente cruciales.
La colaboración entre sectores público y privado también se vuelve esencial para compartir inteligencia y mejores prácticas, fortaleciendo así la resiliencia global ante las amenazas cibernéticas.
En conclusión, la seguridad en la nube seguirá siendo una preocupación crucial a medida que las empresas adopten esta tecnología transformadora. Se destaca la importancia de mantener una postura proactiva para proteger los datos y garantizar la integridad de las operaciones en la nube.
En este contexto, Metabase Q, líder en ciberseguridad en América Latina, está a la vanguardia, proporcionando iniciativas y soluciones para hacer frente a los cibercriminales que amenazan el bienestar y el crecimiento de organizaciones y comunidades. La seguridad en la nube se presenta como una necesidad imperativa para el éxito continuo en la nueva era digital.
Por: Andrea Gómez Farias
@MetabaseQ
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