LA NAO DE CHINA

¿Cómo impulsar el nearshoring proveniente de Asia?

En este punto, caemos en un tremendo desconocimiento de las dinámicas de los países que regularmente son exportadores netos de capitales (China, Corea, Japón e India básicamente en el caso de Asia)

OPINIÓN

·
Adolfo Laborde / La Nao de China / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

He leído con mucha atención los múltiples análisis que abordan el tema del nearshoring o relocalización y lo que esto representa para nuestro país. Se habla de una segunda fase del Momento Mexicano (Mexican Moment) y la gran mayoría de los especialistas usan diversos enfoques para concluir que México está perdiendo oportunidades en esta gran ola de inversiones.

No puedo estar más que de acuerdo con ellos, aunque pocos han analizado cómo trabajar de manera organizada, planeada y de largo plazo, con conocimiento de los entornos de negocios del país de dónde vendrá la inversión, o la naturaleza del encadenamiento productivo si se trata de una empresa global, multinacional, transnacional o internacional.

Me parece que aquí radica el punto débil de todo lo que he leído. Explico. Regularmente se parte de la idea que un día los directivos de una empresa que busca relocalizarse llegan a la conclusión (por los factores que todos conocemos) que deben acercarse al mercado de América del Norte y que, por cuestiones de competitividad, México es una magnífica opción.

Nada más erróneo. En este punto, caemos en un tremendo desconocimiento de las dinámicas de los países que regularmente son exportadores netos de capitales (China, Corea, Japón e India básicamente en el caso de Asia). Este patrón es normal en las empresas grandes ya establecidas en México, es decir, aquellas que no tienen necesidad de realizar consultas con las agencias u oficinas de promoción o embajadas del país destino de la inversión; ellas tienen oficinas de representación en nuestro país o robustas áreas de internacionalización que hacen el trabajo, en otras palabras, no necesitan ayuda ya que conocen qué deben de hacer al respecto.  Entre otras cosas, saben perfectamente de los incentivos que se ofrecen en los tres niveles de gobierno, cuentan con estudios de factibilidad de la inversión y ya han, en la mayoría de los casos, realizado inversiones.

Lo que busca ese tipo de empresas es una expansión o mejores condiciones para su operación. Solo reinvierten o en ocasiones transfieren algunas líneas de producción por el reacomodo de su cadena de valor o suministro.

Pienso que la oportunidad se encuentra en todas aquellas empresas que muchas veces no conocen México (literalmente no saben dónde está), y a ellas deberíamos de enfocar los esfuerzos de atracción de la inversión.

Me refiero a un programa de gestoría gubernamental profesional y con conocimiento técnico de promoción comercial y de inversiones en el exterior, en dónde lejos de ofrecer, a veces, cosas que probablemente van en detrimento del interés nacional, difundan realmente qué es lo que se puede ofrecer en cuanto las necesidades nuestras y de dichas empresas, a comenzar con su vocación industrial y la capacidad instalada en México para atenderlas.

El problema de no hacer esto es dejar a los desarrolladores o agentes comerciales privados hacer el trabajo. El resultado es un desarrollo sin control de las regiones que reciben la inversión y un sistema de estira y afloja en cuanto a los incentivos que se exigen para su instalación. Esto, si aspiramos a un desarrollo industrial regional de largo plazo no se puede permitir. Es necesario establecer sinergias entre la inversión que llega y las necesidades del país para su desarrollo. En esta materia, hay que prestar mucha atención a la propuesta de política pública en desarrollo tecnológico e industrial de largo plazo que el CIDE presentó recientemente. El evento se pude consultar en: https://www.youtube.com/watch?v=PmEEZHeGfKE

POR  ADOLFO LABORDE

PAL