Quizás algunos de ustedes recuerden una época cuando el encargado, al partir en dos un boleto, garantizaba tu acceso a la sala.
Algo así estamos viviendo en las Grandes Ligas en estos precisos días si observamos la definición de algunas vibrantes Divisiones.
Porque una cosa es la agradable coincidencia de dos equipos con un gran nivel de pelota enfrentándose –a cualquier altura del calendario–, y otro escenario es donde definen su pase al enfrentarse, casi, casi algo así como “dividiendo para acceder”.
Si bien nadie se lo esperaba, estos espectaculares Orioles de Baltimore se meten de nuevo a una postemporada y es algo lo cual no lograban desde 2016, en una División tan, pero tan, competida como la Este de la Liga Americana, donde los emplumados de Maryland marcaron el paso después del digamos “ciclónico” inicio de sus cercanos competidores.
Como dato nada menor, ahora quienes tienen una marca negativa en ese pelotón son, nada menos que unos Medias Rojas de Boston, de quienes platicábamos hace escasos días sobre su real posibilidad –antes impensada– para meterse en la fiesta y helos ahí, casi helados al final.
Los Rays de Tampa Bay, por su parte, tienen mucho que festejar no sólo por el fantástico logro de meterse a una quinta temporada consecutiva con playoffs, el posible anuncio de un (¿quizá ya más cercano?) nuevo estadio y la verdad que si su sonrisa está ahí, es por el mérito de hacer tanto con tan poco… una nómina consistentemente, en las de menos gasto de tooodas Las Mayores y siempre con peloteros destacando, con un eléctrico amor a su camiseta, regalándonos un buen beisbol como para que equipos ricachones (cof cof Los Mets cof cof) aprendieran un poquito sobre optimizar recursos.
Obviamente en la Liga Americana seguiremos insistiendo que el duelo de expectativas podría ser entre los mencionados Orioles de Baltimore y los Astros de Houston, aunque… oiga usted, este nivel también de los Azulejos de Toronto y en una de esas hasta de los Mellizos de Minnesota, nos pueden regalar un tremendo nivel de juego en el mejor beisbol del mundo.
Un dato jubiloso: Allie, la esposa de Rocco Baldelli –manager de los mencionados Mellizos– recién acaban de ser papás de unos… ¡¡gemelos!! Los mejores deseos no se hicieron esperar, lo simpático es el juego de palabras para Baldelli, en cuanto a si eso de manejar “mellizos” será posible. También en eso es generoso el beisbol, regalando dicha dentro y fuera del diamante de juego.
Merecidísima felicitación a toda la organización de los Pericos de Puebla por su campeonato en la Liga Mexicana de Beisbol al coronarse venciendo a unos súper aguerridos Algodoneros del Unión Laguna, quienes dieron gallarda pelea beisbolera en seis –de verdad que sí aplica– dramáticos encuentros de buena pelota.
La LMB debe mejorar un mundo su producto audiovisual y por igual en cuanto a los criterios para que tengamos más peloteros nacionales brillando.
POR ALEJANDRO AGUERREBERE
COLABORADOR
@ALEJOU
PAL