En México, como en cualquier otro país, las elecciones presidenciales generan un ambiente de expectativa y debate en la sociedad. En Ipsos medimos la temperatura social permanentemente y sabemos que las expresiones políticas en tiempo electoral influencian las percepciones sociales sobre diversos temas y uno de los temas favoritos es el papel que juegan las organizaciones privadas en el entorno nacional. Conocer la reputación que tiene nuestra organización es importante siempre, pero más en entornos electorales donde los ánimos se caldean y las opiniones se radicalizan, para bien o para mal.
Los procesos electorales en México suelen ser momentos de incertidumbre y polarización. La sociedad se vuelve más receptiva de las prácticas empresariales y su impacto en la economía y la sociedad en general y una incorrecta ejecución de la empresa puede afectar su relación con los consumidores, los stakeholders y la percepción pública de la marca.
Por ello, es fundamental comprender el impacto de los discursos (que muchas veces son más dañinos que la potencial regulación) en el sector empresarial mexicano. Las políticas y acciones de los candidatos pueden llevar a cambios regulatorios, modificaciones fiscales y cambios en las políticas económicas del país. Estas medidas pueden influir directa o indirectamente en la reputación de las organizaciones y es necesario estar preparados para anticiparse a posibles problemas, adaptar estrategias y actuar en consecuencia. Durante el periodo electoral, la atención pública se intensifica y es fundamental estar preparados para reaccionar de manera rápida y efectiva ante cualquier situación que pueda afectar la imagen de la compañía en el contexto mexicano.
En Ipsos tenemos evidencia que la sociedad mexicana espera que las organizaciones actúen de manera coherente y transparente, alineadas con los valores que promueven, por lo que es importante comprender cómo se posicionan las empresas frente a las propuestas políticas en México. Conocer nuestra reputación corporativa permite identificar cualquier inconsistencia entre las acciones de la empresa y sus mensajes, brindando la oportunidad de alinear y así, fortalecer la imagen de la organización.
Sabemos que en tiempos electorales, las empresas deben ser conscientes de que cualquier acción, declaración o posición puede ser ampliamente difundida y analizada por una muy polarizada sociedad mexicana. Por lo tanto, contar con un sistema de monitoreo de reputación que permita anticiparse a los posibles riesgos y aprovechar las oportunidades que este contexto ofrece es fundamental para el éxito empresarial.
Pareciera que si la empresa es exitosa comercialmente su reputación tenderá a ser buena ya que cuenta con el favor de sus audiencias, clientes y prospectos, pero estas condiciones pueden cambiar y no conocer nuestra reputación como empresa puede impactar en el corto, mediano y largo plazo nuestra relación con las diferentes audiencias. En suma, conocer la reputación de nuestra organización permite:
1. Evaluación de la percepción pública: implica evaluar cómo la empresa es percibida por el público en general, incluyendo a los consumidores, inversores, socios comerciales y otros stakeholders. Esto proporciona información valiosa para determinar si su imagen está alineada con sus objetivos y valores.
2. Identificación de fortalezas y debilidades: permite a la empresa comprender en qué áreas está desempeñándose bien y cuáles son los aspectos que deben ser mejorados o corregidos. Con esta información, la empresa puede tomar medidas concretas para construir y fortalecer su reputación.
3. Establecimiento de objetivos y estrategias claras: proporciona una dirección clara y permite que la empresa implemente estrategias específicas para lograr esos objetivos. Sin una medición adecuada, la empresa puede carecer de una comprensión completa de dónde se encuentra en términos de reputación y cómo avanzar.
4. Gestión de riesgos y crisis: tener una visión clara de la situación actual de la reputación corporativa, le permite a la empresa anticiparse a los posibles problemas y establecer planes de gestión de crisis efectivos. Esto ayuda a salvaguardar la reputación de la empresa y minimizar el impacto negativo en caso de problemas imprevistos.
En los tiempos electorales por venir, el monitoreo de la reputación corporativa es esencial para garantizar el éxito de las empresas. La sociedad mexicana está atenta a las acciones de las organizaciones y espera coherencia y transparencia. Anticiparse a los posibles riesgos y aprovechar las oportunidades que se presentan en este contexto político puede marcar la diferencia en la percepción pública y el desempeño corporativo.
POR FERNANDO ÁLVAREZ
SENIOR GROUP DIRECTOR
IPSOS EN MÉXICO
¿YA NOS SIGUES?:
LINKEDIN: IPSOS EN MÉXICO
IG: @IPSOSENMEXICO
TWITTER: @IPSOSENMEXICO
FACEBOOK: IPSOSENMEXICO
HTTPS://WWW.IPSOS.COM/ES-MX
PAL