COLUMNA INVITADA

Riesgos y vulneración de la información personal en la nube

La nube, por su parte, se refiere a servicios digitales que permiten el almacenamiento, acceso y procesamiento de datos a través de internet

OPINIÓN

·
Julio César Bonilla / Columna invitada / El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

En esta era digital, con los vertiginosos avances y desarrollos tecnológicos alcanzados; y, con los que hemos hecho posible una nueva y poderosa forma de comunicación y colaboración humana, donde nuestra información personal se ha convertido en uno de los activos más valiosos. Nuestros nombres, direcciones, números de teléfono, correos electrónicos e incluso, nuestros hábitos de navegación en línea se almacenan en algún lugar, ya sea en nuestros dispositivos personales o en servicios digitales conocidos como "la nube". Pero ¿qué implica realmente esta nube en términos de tecnología digital? ¿Qué riesgos o posibilidades de vulneraciones de información personal conlleva?

Empecemos por comprender qué es la información personal. Se trata de cualquier dato que pueda identificarnos de manera directa o indirecta. Incluye elementos como nuestra fecha de nacimiento, género, preferencias personales, historial médico, información financiera y más. Estos datos son valiosos para empresas y organizaciones, ya que les permiten conocer mejor a los individuos y así, ofrecerles productos y servicios en modo personalizado.

La nube, por su parte, se refiere a servicios digitales que permiten el almacenamiento, acceso y procesamiento de datos a través de internet. En lugar de almacenar información únicamente en nuestros dispositivos locales, podemos utilizar la nube para guardar nuestros archivos y acceder a ellos desde cualquier lugar y en cualquier momento, siempre y cuando tengamos conexión a internet. Esto nos brinda una gran comodidad y flexibilidad, ya que ya no dependemos de un dispositivo específico para acceder a nuestros datos.

Las ventajas de utilizar servicios en la nube son innegables. Podemos almacenar grandes cantidades de información sin preocuparnos por el espacio en nuestros dispositivos, realizar copias de seguridad automáticas para proteger nuestros archivos importantes y compartir fácilmente documentos y todo tipo de información, con otras personas. Además, muchas aplicaciones y servicios basados en la nube ofrecen características colaborativas que nos permiten trabajar en equipo de manera eficiente.

Sin embargo, al depositar nuestra información personal en la nube, también nos exponemos a ciertos riesgos y vulneraciones de seguridad. Uno de los mayores temores es la violación a la privacidad. Si una empresa o un proveedor de servicios en la nube no implementa medidas de seguridad adecuadas, nuestros datos personales podrían ser accesibles para terceros no autorizados. Lo cual, podría resultar en robo de identidad, acoso cibernético, violencia digital o fraude financiero.

Además, existe el riesgo de pérdida de datos. Aunque la nube ofrece copias de seguridad automáticas, si el proveedor de servicios experimenta una falla en sus sistemas o sufre un ataque cibernético, nuestros archivos podrían ser irrecuperables. Esto nos lleva a cuestionarnos sobre la confiabilidad de la nube y nos obliga a ser precavidos al elegir servicios que nos ofrezcan garantías de seguridad y respaldo. También, no tener tal cuidado puede implicar la actualización de otro riesgo importante como lo es la falta de control sobre nuestros propios datos. Almacenar información personal en la nube implica confiar en terceros para su gestión y protección. Esto nos deja en una posición vulnerable, ya que no tenemos un control total sobre cómo se utilizan nuestros datos ni qué medidas de seguridad se implementan para protegerlos. Asimismo, algunos proveedores pueden recopilar datos para fines publicitarios o incluso, compartirlos con otras empresas o agentes digitales, sin nuestro conocimiento o consentimiento.

Ante estos riesgos, es fundamental tomar medidas para proteger nuestra información personal almacenada en la nube. Por ejemplo, es importante investigar y seleccionar proveedores de confianza, reconocidos por su seguridad y privacidad; y, optar por aquellos que implementen medidas sólidas de cifrado y protección de datos. Las personas usuarias de este tipo de servicios digitales, podemos y debemos, contribuir a salvaguardar nuestra información adoptando medidas como utilizar contraseñas únicas y complejas para nuestras cuentas en la nube y habilitar las autenticaciones de dos factores siempre que sea posible. Esto proporciona una capa adicional de seguridad al requerir un segundo factor de verificación, como un código enviado a nuestro teléfono móvil.

También, frente a los riesgos y vulneraciones de nuestra información personal almacenada en la nube, es relevante mantener nuestros dispositivos y aplicaciones actualizados. Porque, las actualizaciones y parches a los sistemas operativos respectivos a menudo incluyen correcciones de seguridad que fortalecen sus defensas contra posibles vulnerabilidades. Asimismo, aunque confiemos en la nube para almacenar nuestros archivos, es recomendable realizar copias de seguridad periódicas en dispositivos físicos locales. Esto nos brinda una capa adicional de protección en caso de pérdida de datos o problemas con el proveedor de servicios en la nube. Por ello, también, es fundamental que revisemos y ajustemos las configuraciones de privacidad de nuestras cuentas en la nube; por ejemplo, limitando la cantidad y el tipo de información personal compartida públicamente y restringiendo el acceso a nuestros archivos solo a las personas necesaria, con el objeto de reducir los riesgos de exposición informativa no deseada.

Finalmente, todas y todos, debemos mantenernos informados sobre las últimas tendencias y amenazas en el ámbito de la seguridad cibernética. En ese sentido, vale mucho la pena participar en programas de educación y capacitación en línea para mejorar nuestra conciencia y conocimientos acerca de este relevante tema.

Al adoptar medidas proactivas y seguir buenas prácticas de seguridad, podemos proteger nuestra información personal y minimizar las posibilidades de ser víctimas de su vulneración. La clave, se encuentra en procurar encontrar un equilibrio entre el aprovechamiento de las ventajas que nos ofrece la tecnología y la protección de nuestra privacidad.

En conclusión, la tecnología de la nube ha revolucionado la forma en que almacenamos, accedemos y compartimos información personal. Nos brinda comodidad, flexibilidad y eficiencia en nuestras tareas diarias. Sin embargo, es fundamental ser conscientes de los peligros potenciales y tomar medidas para proteger nuestra información personal en la nube. 

Esta tecnología ofrece grandes ventajas y oportunidades, no cabe duda. Pero, también requiere del ejercicio de una mayor responsabilidad, tanto por parte de los usuarios como de los proveedores de este tipo de servicios. En todo caso, las seria consideración que hagamos, acerca de la fundamental trascendencia que tiene proteger nuestra información personal y privacidad, debe ser prioritaria para todos nosotros, en esta era digital.

POR DR. JULIO CÉSAR BONILLA GUTIÉRREZ

COMISIONADO CIUDADANO DEL INFO CDMX

PAL