Han transcurrido 95 años de que el presidente electo Álvaro Obregón Salido es asesinado el 17 de julio de 1928 en el restaurante La Bombilla en San Ángel, lugar al que asistió invitado a una comida organizada por legisladores federales guanajuatenses, la orquesta de Alfonso Esparza Oteo interpretaba El limoncito, momento en que José de León Toral aprovecha para mostrarle un dibujo que le realizó, instante para valerse y descargar su pistola Start 32.
Eran las 14:20, la vida del general Obregón, él hombre imbatible era cegada por un solitario agresor, el día de su muerte, el general Obregón acumulaba 48 años de edad, había nacido el 19 de febrero de 1880 en la hacienda de Siquisiva, Sonora.
José de León Toral, es descrito por el historiador Pablo Serrano Álvarez, en el libro Álvaro Obregón, Cal y Arena, “un fanático católico guiado por el ejemplo de los hermanos Pro y las lucubraciones de Concepción y de la Llata -La Madre Conchita- en torno a la necesidad de matar al presidente Calles y al presidente electo Obregón para terminar con la persecución religiosa, había decidido convertirse en mártir de la causa religiosa y asesinar al Rayo de la guerra”.
El general Obregón, fue Primer Mandatario en el periodo del 1 de diciembre de 1920 al 30 de noviembre de 1924; el artículo 83 de la Constitución señalaba, “El Presidente entrará a ejercer su encargo el 1º de diciembre , durará en él cuatro años , y nunca podrá ser reelecto”, el artífice para modificar el precepto constitucional para la reelección del sonorense fue el diputado potosino Gonzalo N. Santos, en sus Memorias, señala, que Plutarco Elías Calles le ordenó, “Para que pueda volver el general (Obregón) a la presidencia de la República va a ser necesario que se traslade a entrevistarse con él a Sonora”.
Continúa el Alazán Tostado, “y hacerle ver de parte mía que es indispensable reformar la Constitución”, la modificación del citado precepto, publicado en él DOF del 22 de enero de 1927, le allanó el camino para un nuevo periodo, “No podrá ser electo para el periodo inmediato. Pasado éste, podrá desempeñar nuevamente el cargo de presidente. Solo por un periodo más…”.
En julio de 1927, Obregón registra su candidatura a la Primera Magistratura, de igual manera lo hacen los generales Arnulfo R. Gómez y Francisco Serrano, estos dos últimos son borrados de la escena política, el oriundo de Siquisiva, tiene el campo libre, en los comicios registrados a principio de julio de 1928, obtuvo 85 mil votos.
El historiador Pablo Serrano Álvarez, apunta lo siguiente, el presidente Elías Calles acudió a la calle de Jalisco 185, donde yacía el cuerpo inerme del general Obregón y expresó ¿querías ser presidente? Tal por cual, pues no llegaste.
En sus primeras declaraciones, León Toral, manifestó, que en el tranvía escuchó que un rayó mató al aviador Carranza, “¡Cómo ese rayo no lo mandó Dios al señor Obregón o al señor Calles!
POR RUBÉN MARTÍNEZ CISNEROS
COLABORADOR
MAAZ