VENTANA POLÍTICA

Transición energética: lejos de la meta

Aunque es una prioridad global, las inversiones en infraestructura y eficiencia operativa siguen siendo mucho menores a las que se requieren

OPINIÓN

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Verónica Ortiz / Ventana Política / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

Tener acceso a energía es una necesidad básica de la vida cotidiana. Pero cientos de millones de personas en el mundo viven sin electricidad, y esta cifra se incrementó en 2022 por primera vez en décadas. Los datos forman parte del Informe Global de Inversión en Energías Renovables 2023, elaborado por la agencia de Las Naciones Unidas para Comercio y Desarrollo (UNCTAD, por sus siglas en Inglés) y dado a conocer esta semana.

En términos generales, los flujos de inversión extranjera directa (IED) en 2022 fueron de 1.3 trillones de dólares, una caída de 12% respecto del año anterior. 

Una combinación de fin de crisis sanitaria por la pandemia de COVID-19, desastres naturales por el cambio climático y choques económicos causaron incertidumbre entre la comunidad inversionista mundial y pusieron en pausa proyectos ante la creciente inflación, temores de una recesión y turbulencia en los mercados financieros.

La disparidad en los patrones de financiamiento global se mantuvo. La inversión en países en desarrollo se concentró en un pequeño grupo de grandes economías emergentes (Brasil y México, entre ellas), mientras que los flujos hacia países de menor tamaño se estancaron y para los menos desarrollados cayeron 16%. 

Pero incluso entre los que recibieron recursos hubo diferencias. Por ejemplo, Brasil se colocó en sexto lugar de la tabla y México hasta el sitio 11.

Una buena noticia es que aunque los montos de IED global disminuyeron, los proyectos anunciados van en la dirección correcta. 

Las cifras invertidas en las industrias extractivas y energías fósiles se mantuvieron estables, al tiempo que los proyectos en renovables se han triplicado desde 2015. 

No obstante ello, la mala noticia es que llevamos al menos una década de retraso en los esfuerzos para combatir el calentamiento global. Es decir, la distancia de los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) se amplía año con año a pesar del financiamiento creciente.

De ahí la importancia de invertir en energías renovables en países en vías de desarrollo para cerrar la brecha. Sin embargo, aunque la transición energética es una prioridad global, las inversiones en infraestructura y eficiencia operativa siguen siendo mucho menores a las que se requieren. 

Recursos para redes eléctricas, almacenamiento y operación son más necesarios que los destinados a la generación de renovables, pero reciben menos atención. Y en los países menos desarrollados, la transición energética compite con otras prioridades más urgente atención.

El informe apela por mucho más apoyo de los países desarrollados para concretar inversiones en energía en las naciones de menor tamaño. Como señala Antonio Gutiérrez, secretario general de la ONU, ya es más que apremiante democratizar el acceso a fuentes de energía eficientes y de bajo costo para toda la gente en todos los rincones del mundo.  

POR VERÓNICA ORTIZ

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@VERONICAORTIZO

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