DESDE AFUERA

Trump se defiende

Se queja de una "cacería de brujas", se dice víctima, y de hecho ya pidió que los republicanos en el Congreso hagan "algo" para "detener" el uso político del FBI

OPINIÓN

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José Carreño Figueras / Desde Afuera / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

En un clásico movimiento populista, el expresidente  de Estados Unidos, Donald Trump, denunció ser objeto de una persecución política después de ser informado que fue formalmente acusado por la posesión y uso de documentos secretos que mantenía indebidamente en su residencia de Mar-a-Lago.

Trump se queja de una "cacería de brujas", se presenta como víctima, y de hecho ya pidió que los republicanos en el Congreso hagan "algo" para "detener" el uso político del Departamento de Justicia y la Oficina Federal de Investigaciones (FBI).

Un aliado de Trump, el ahora presidente del Comité Judicial de la Cámara de Representantes, Jim Jordan, se hizo ya eco de  amenazas de recortar los fondos del Departamento de Justicia y el FBI si insisten en investigar o acusar a Trump, una idea impopular entre los republicanos del Senado, que temen eso ayude a los demócratas.

Es la más actual de las polémicas y de los problemas judiciales y políticos que enfrenta Trump, el empresario que rompió reglas, llegó a presidente de Estados Unidos y se niega aún a aceptar que perdió la reelección en 2020.

Pero Trump es la figura dominante en el Partido Republicano, y como tal encabeza las preferencias para obtener la candidatura presidencial de 2024.

Pero sus problemas legales debilitan su posición política, ya que no sólo incluyen esos documentos retenidos indebidamente después de su salida de la Casa Blanca. Otros posibles juicios son su presunto involucramiento en el ataque de sus partidarios al Capitolio, sede del Congreso estadounidense, el 6 de enero de 2021, y el intento de cambiar los resultados de la elección presidencial en el estado de Georgia.

Los cargos judiciales pueden ocupar la atención de Trump, tanto que hay quienes especulan con la idea de que el actual puntero asista a la convención nacional republicana, en julio de 2024, con un grillete electrónico.

Con todo, para Trump es parte de un juego: su forma de trabajo como empresario lo hizo parte de más de cuatro mil juicios.

Para algunos, las acusaciones pueden ser, como dice Trump, un intento de anularlo electoralmente; para otros, una muestra de las razones por las que no debe regresar a la Presidencia.

Los competidores de Trump van de aquellos que como el gobernador de Florida, Ron DeSantis, aspiran a tomar su manto de líder antisistema y se dejan ver como más trumpistas que Trump, pero sin su bagaje personal, o quienes, como el exvicepresidente Mike Pence y el exgobernador Chris Christie, creen que puede ser un problema para el partido y para el país.

Tantos como ocho republicanos han anunciado su intención de buscar la candidatura presidencial de ese partido, en lo que se ve como una señal de que el expresidente Trump está en problemas reales.

Con todo, se teme que las acusaciones provoquen un endurecimiento del respaldo a Trump entre un sector republicano que desconfía de las autoridades, pero los más tradicionales temen que ahonden los temores y preocupaciones de votantes independientes y demócratas.  

POR JOSÉ CARREÑO FIGUERAS

JOSE.CARRENO@ELHERALDODEMEXICO.COM

@CARRENOJOSE1

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