No, no hablamos de aquel juego infantil para brevemente decidir una pugna entre amigos de la cuadra, nos estamos refiriendo a algo quizá mucho más complicado.
Hay una gran brecha entre varios equipos de las Grandes Ligas, algo visible en el standing actual. En la Liga Americana es cada vez más evidente casi a la mitad de este extenso camino de una temporada regular pactada a 162 juegos… ya tenemos una buena ventana de análisis y la tendencia se nota acentuada.
Quizá no sea sorpresa el contraste entre estas dos divisiones, aunque, de repente cabe preguntarse si juegan a lo mismo, de acuerdo al siguiente dato:
Terminando la semana anterior, todos los equipos de la División Este de la Liga Americana, tienen marca ganadora, mientras, ninguno de los equipos de la División Central de la misma Liga Americana, muestra una marca ganadora.
Cabe aclarar que los Mellizos de Minnesota juegan para 36-36 para ser líderes de esa División del Centro, lo cual claramente no los tiene más que para un muy pobre .500, si lo comparamos con la excelente marca de 51-24 (.680) de los únicos arriba de los 50 éxitos Rays de Tampa Bay, y el también muy meritorio récord de 44-27 (.620) de los Rangers de Texas.
Para darnos una idea, los Rays están teniendo a distancia a equipos de tremendo talento y roster bien nutrido como lo son los Orioles de Baltimore (5.0 de diferencia), a los siempre peligrosos Yankees de Nueva York (a 10.5), a los Azulejos de Toronto (11 juegos) y a unos Medias Rojas de Boston (12.5), quienes de repente barren en el Bronx, es decir, todos juegan a tope toda la temporada, también la única División con todos sus equipos con diferencial a favor entre carreras producidas y recibidas.
En el otro caso, estos Rangers de Texas no sólo tienen el mejor referente recién mencionado (+148 en carreras a favor) si no que mantienen a 4.5 juegos a los Angelinos nada menos que de los extraordinarios Shohei Ohtani y Mike Trout, con la sorpresa de un bache de los actuales campeones Astros de Houston, quienes a 5.5 juegos están empezando a preguntarse si tienen campeonitis.
Es la misma Liga Americana, donde precisamente están los Atléticos de Oakland, con su tristísimo 19-55 (.257) y los Reales de Kansas City, con su nada mejorcito 19-52 (.268), cuando seguramente muchos comentarán cómo esas marcas son producto de lo competitivo de la actual temporada y sí, muy cierto, curiosamente dos equipos que están buscando (Atléticos mediante mudanza) tener los recursos económicos para un nuevo estadio…
Ah, ok, entonces cabe oportuna pregunta: ¿un nuevo estadio les provocará armar un equipo competitivo y meter mayor inversión en el roster?
Todo un tema cuando los tres sotaneros divisionales en la mencionada Americana, tienen un estadio digamos “algo vetusto”: para plantear si necesariamente un nuevo inmueble hará competidor a un equipo; el caso de los Dodgers de Los Ángeles puede probar lo contrario, aún si les arman un boicot en estos días.
POR ALEJANDRO AGUERREBERE
@ALEJOU
PAL