COLUMNA INVITADA

El milagro de Vietnam

Vietnam ha pasado de ser una economía planificada a una economía más orientada al mercado donde sus principales socios son Estados Unidos, China, la Unión Europea, Corea y Japón

OPINIÓN

·
José Ignacio Zaragoza Ambrosi / Columna Invitada / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

Entre 1955 y 1975 se llevó a cabo la Guerra de Vietnam, conocida internamente como Guerra de Resistencia contra Estados Unidos que trataba de impedir la unificación de Vietnam del Norte y Vietnam del Sur bajo un mismo gobierno comunista. En aquel
entonces Vietnam era uno de los países más pobres del mundo, pero hoy, en el índice de “calidad de vida” de este país asiático alcanzó 78.49 puntos, ubicándose en el puesto 62 entre 165 naciones. 

Vietnam es un caso exitoso de resiliencia. De hecho, esta semana la Directora General de la Organización Mundial de Comercio, Okonjo-Iweala elogió a Vietnam por utilizar el comercio para impulsar el crecimiento y reducir la pobreza. Este país es un ejemplo de cómo puede utilizarse el comercio mundial a fin de impulsar el desarrollo económico y ampliar las oportunidades para las personas, declaró la Directora General. 

La adhesión de Vietnam a la OMC en el 2007 contribuyó a promover el crecimiento del comercio y a mejorar el nivel de vida, destacando que el comercio de mercancías ha aumentado de USD 111.300 millones en 2007 a USD 730.200 millones en 2022. 

“El aprovechamiento de la demanda externa ayudó a Vietnam a reducir los niveles de pobreza, pues la proporción de la población vietnamita que vivía con menos de USD 2,15 por día, del 45,1% en 1992, se había reducido al 1,23% en 2018”. Así, la OMC elogió a Vietnam por integrarse en las cadenas de valor mundiales y atraer inversiones extranjeras directas, lo que se tradujo en un aumento de su capacidad de producción y exportación, añadió. Además, durante el 2022 Vietnam alcanzó la mayor taza de crecimiento interanual entre los 10 mayores exportadores de productos hacia los Estados Unidos. 

Vietnam logró un alza del 26% en este indicador con ventas al mercado estadounidense de 135 mil 877 millones de dólares. Por delante de ellos solo están: China, México, Canadá, Japón y Alemania. Como señalan los expertos, Vietnam ha disfrutado de su propio milagro económico en los últimos años, mostrando al mundo cómo convertirse, a través del comercio global, de una de las naciones más pobres a un país de renta media. Su PIB ha crecido en 6.8% durante las últimas 2 décadas, hasta alcanzar los 255 mil millones de dólares. 

Vietnam ha pasado de ser una economía planificada a una economía más orientada al mercado donde sus principales socios son Estados Unidos, China, la Unión Europea, Corea y Japón. Sus mayores exportaciones son productos manufacturados, seguidos
por agropecuarios y combustibles. 

Este ejemplo nos demuestra que cuando un país participa en el comercio internacional, puede aprovechar sus ventajas comparativas especializando su producción de bienes y servicios en los que puede competir. Lo que puede aumentar la eficiencia económica y permitir que el país genere mayores ingresos a partir de sus exportaciones. 

Los ingresos generados a través del comercio exterior si se utilizan correctamente para desarrollar la infraestructura, la educación, la salud y otros programas sociales que ayuden a combatir la pobreza, los países avanzan. Además, el comercio internacional puede promover la transferencia de tecnología y conocimientos, lo que impulsa también el desarrollo económico y mejora la productividad de los países en desarrollo. 

Obviamente hay que tener en cuenta que el comercio exterior por sí solo no garantiza automáticamente la reducción de la pobreza. Para que el comercio sea beneficioso para todos los sectores de la sociedad, es necesario que existan políticas adecuadas y un entorno propicio que promueva la inclusión y la distribución equitativa de los beneficios del comercio. Lo que había faltado en México en las últimas décadas que a pesar del crecimiento del comercio nunca se atendieron las necesidades del sureste y otras zonas vulnerables.

Sumado al comercio, es esencial también abordar otros factores que contribuyen a la pobreza, como los son la desigualdad, la corrupción y la falta de acceso a servicios básicos.

JOSÉ IGNACIO ZARAGOZA AMBROSI
EXPERTO EN COMERCIO EXTERIOR
@ignaquiz

LSN