Estuve hace unas semanas en Alemania durante la Hannover Messe, la feria industrial más importante del mundo. Los temas más relevantes fueron la descarbonización y la resiliencia, temas que están muy presentes a nivel global. Ambos son una gran oportunidad para México, pero especialmente este último, por lo cual me permitiré ahondar un poco más en él.
Durante su discurso inaugural en la ceremonia de apertura de la Hannover Messe, el Canciller alemán, Olaf Scholz, mencionó que “los países están en proceso de reducir la dependencia que genera riesgo y ampliar sus relaciones comerciales". En esta estrategia de "eliminación de riesgos" hay una visión de futuro que, por lo menos en Alemania, se ve como una mayor diversificación, en especial a mercados “confiables”, como es el caso de México. "No solo crearemos una mayor prosperidad local si somos capaces de establecer más etapas de procesamiento en lugares donde las materias primas se producen de forma natural, sino asegurarnos de tener más de uno o dos proveedores en el futuro”.
Thomas Saueressig, jefe de ingeniería de productos de SAP, comentó durante el evento que “las excepciones ahora son la regla. Las cadenas de suministro interconectadas a nivel mundial de hoy en día son especialmente propensas a las interrupciones, con consecuencias de gran alcance para la industria manufacturera. Se necesita producir en mercados con flexibilidad y agilidad para reaccionar rápidamente a los cambios”.
¿Quién es ese país confiable, con una cadena de suministro resiliente, flexible y ágil? Sin duda, México.
He abordado ya en este espacio la reconfiguración del escenario internacional que derivó en una coyuntura caracterizada por la relocalización de cadenas de valor, llamada “nearshoring”. Vivimos en un momento en el que tenemos una oportunidad histórica para impulsar el crecimiento de México a través de la atracción de inversiones por ventajas competitivas como talento humano calificado, ubicación geográfica estratégica y una red de tratados de libre comercio que nos abren la puerta a cerca de 50 mercados.
Bajo este contexto, es fundamental que mantengamos una relación estrecha con aliados estratégicos a través de foros de diálogo como el que se llevó a cabo durante la pasada edición de Hannover Messe, en donde se celebró la Diálogo de Alto Nivel México-Alemania, presidida por líderes empresariales de ambos países.
La importancia de este país europeo para México es grande: existen alrededor de 2,000 empresas alemanas operando en nuestro territorio; es nuestro cuarto socio comercial tras Estados Unidos, Canadá y Japón; y se estima que su inversión extranjera directa de 1999 a 2022 fue de cerca 30,000 millones de dólares, de acuerdo con datos de la Secretaría de Economía.
Nuestros países también comparten intereses al ser potencias manufactureras, particularmente en la industria automotriz, la cual representa alrededor del 53% de la IED total de Alemania en México con 15,903 millones de dólares. Además, cerca del 40% de ella está dirigida a autopartes, con un valor de 6,271 millones de dólares al tercer trimestre de 2022.
México y Alemania ya son líderes del sector de autopartes y automotriz. El desafío hoy es seguir marcando la pauta para los demás países y para ello será vital reforzar la cooperación y crear estrategias que permitan el desarrollo de una industria impulsada por energías renovables, en concordancia con los objetivos globales de sostenibilidad, lo cual fue uno de los temas más relevantes expuestos en la edición 2023 de la Hannover Messe.
Sin embargo, a pesar de la fortaleza que ha mostrado la relación bilateral y cada uno de nuestros países en sus respectivas industrias nacionales, aún enfrentamos desafíos comunes, como la rápida modernización de los procesos productivos derivados de la Industria 4.0 y la creciente demanda de capital humano especializado, los cuales debemos atender de manera conjunta.
Es por esto que representantes empresariales de ambas latitudes nos unimos para dialogar sobre estos retos. Ahora, temas como resiliencia, nearshoring, educación dual, cambios en las cadenas de suministro, inteligencia artificial, digitalización, automatización y electromovilidad son el punto focal de nuestra agenda por el enorme potencial de desarrollo y de negocios que encarnan.
Con certeza compartiré en este espacio los avances que vayamos alcanzando en este diálogo bilateral en futuras ediciones.
POR FRANCISCO N. GONZÁLEZ DÍAZ
PRESIDENTE EJECUTIVO DE LA INDUSTRIA NACIONAL DE AUTOPARTES
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