CLARABOYA

Guardadito del Bienestar

Segalmex no solamente fue creada en el tiempo de Andrés Manuel López Obrador sino que fue concebida bajo los ideales de austeridad

OPINIÓN

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Azul Etcheverry / Claraboya / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

15 mil 500 millones de pesos, dos veces la estafa maestra, es la suma dada a conocer por la Auditoría Superior de la Federación sobre el desfalco de Segalmex. Uso ilícito de atribuciones y facultades, es el concepto bajo el cual se investiga este delito, en otras palabras: corrupción.

Seguridad Alimentaria Mexicana, instancia creada al inicio de esta administración con el objetivo de brindar seguridad alimenticia a las familias con menores recursos, hizo todo menos llevar alimentos para los que menos tienen.

No solo estamos hablando de robo, sino de un desperdicio de recursos que raya en lo inhumano, gran parte los alimentos adquiridos por Segalmex no se llegaron a vender y se descompusieron, un ejemplo: de la adquisición de 73 mil 4 millones de pesos en carne, se logró comercializar apenas 11 por ciento, todo esto según un informe del propio organismo. 22 órdenes de aprehensión por parte de la Fiscalía General de la República, resulta un número modesto para la magnitud del asunto. ¿Cómo un fraude de este tamaño pudo ser orquestado por sólo 22 personas?

Parece que sólo hay dos respuestas, o habrá un alto nivel de impunidad o el nivel de corrupción está en lo más profundo de esta “transformación”, en el peor de los casos, ambas.

A diferencia de otros asuntos y señalamientos para el Presidente, donde una de sus excusas preferidas era echar culpas a administraciones pasadas, en este caso es imposible, Segalmex no solamente fue creada en el tiempo de Andrés Manuel López Obrador sino que fue concebida bajo los ideales de austeridad, de recortar presupuesto, de renovar, de salvar dinero. No hay responsables en el pasado.

El presidencialismo o protagonismo de López Obrador ha sido la guarida perfecta para los principales responsables no sólo de Segalmex sino de las ya bastantes tragedias y escándalos de la 4T, no hay quien dé respuestas y a quien le hacen las preguntas se limita a otra de las excusas favoritas: “nos quieren perjudicar”.

¿Se acaban los pretextos? ¿No hay a quien culpar o más bien no hay manera de defender lo indefendible? Hay sorpresa y asombro, y no por que un desfalco no se haya visto antes, sino porque se prometió acabar con ellos, ahora acompaña un aire de tristeza y desilusión, pues no sólo se ha descubierto que siguen sucediendo, sino que son peores que los anteriores, que el cáncer de México, la corrupción, sigue causando estragos para sus ciudadanos, que la transformación prometida por los líderes y ansiada por el pueblo, no ha llegado y hoy se ve lejos de hacerlo.

México sigue considerado uno de los países más corruptos del mundo, ocupa el puesto 126 de 180 a nivel mundial y el puesto siete de 10 en Latinoamérica, este reciente escándalo seguramente lo hará ganar posiciones y alejarse de las promesas de dar primero a los más necesitados.

POR AZUL ETCHEVERRY
AETCHEVERRYARANDA@GMAIL.COM 

@AZULETCHEVERRY

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