El pasado 31 de marzo la Secretaría de Hacienda entregó a la Cámara de Diputados los Pre-Criterios Generales de Política Económica 2024, documento que constituye una base para la elaboración del Paquete Económico que el Ejecutivo Federal habrá de entregar a la Cámara de Diputados en septiembre.
Entre los datos más destacables el gobierno pronostica que el PIB se mantendrá en 3%; la inflación disminuirá de 5% estimado para 2023 a 4%; además, un precio promedio de barril de petróleo de 56.3 dólares, precio menor a los 66.3 dólares estimado para este año.
Sin embargo, a punto de cumplirse cinco años del gobierno de la transformación, vale la pena subrayar los extraordinarios resultados de la nueva política económica, y es que los resultados son irrefutables. La Nueva Política Económica de la 4T se sustenta en principios que los conservadores y muchos despistados jamás podrían imaginar ni encontrar en los libros tradicionales.
A la llegada de AMLO a la Presidencia de la República se estableció una estrategia dual consistente en rediseñar la política de gasto para reducir las brechas sociales e impulsar la inversión productiva, pero al mismo tiempo, en poner punto final al acelerado crecimiento del endeudamiento público, a la par que se aumentaban los ingresos tributarios.
Hoy los ingresos crecen en promedio un 2.8 por ciento; tenemos una baja del porcentaje de pago de la deuda en casi 4 puntos respecto del PIB, la recuperación de la inversión pública ya genera decenas de miles de nuevos empleos y, por si fuera poco, un aumento real del salario mínimo en 90 por ciento que ayudó a crecer el consumo privado en 6.5 por ciento, una cifra inédita.
La política económica que se ha aplicado en este sexenio está enfocada en erradicar la corrupción y mejorar la distribución del ingreso buscando la igualdad, la equidad y el bienestar de la gente, todo ello en un entorno de estabilidad macroeconómica, finanzas públicas sanas y un sistema financiero sólido y bien capitalizado, a pesar del difícil panorama al que este gobierno tuvo que hacer frente derivado de reiterados factores externos como la pandemia, el conflicto entre Rusia y Ucrania, la inflación en el vecino país del norte, entre otros.
Tal y como lo señala el documento elaborado por la SHCP, los pre-criterios dan continuidad al proyecto de transformación de este gobierno, que promueve el bienestar social a través de la creación de empleos de calidad, la reducción de las desigualdades sociales y el fortalecimiento del mercado interno. Con ello se garantizan las obras estratégicas que detonarán el desarrollo del sur sureste, y se asegura una transición ordenada en 2024, en un marco de estabilidad económica.
Seguramente los grupos conservadores siguen absolutamente desconcertados y se aprestan a intensificar la montaña de mentiras que han pretendido hacer creer desde el año 2018, como sus vaticinios de apocalipsis económicos o que AMLO pretendía reelegirse.
La Nueva Política Económica de la 4T es una realidad y sus fundamentos son la clave para el desarrollo de largo plazo, un desarrollo que ya ha empezado y está en marcha.
POR BENJAMÍN ROBLES MONTOYA
COLABORADOR
@BENJAMINROBLESM
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