El uso de una tragedia provocada por el huracán Otis en Acapulco para obtener ventaja política es una de las tácticas más bajas que la oposición ha empleado de cara a las elecciones de 2024. Es sorprendente cómo se han enfocado en la tragedia, convirtiéndola en un tema político, en lugar de brindar apoyo. Han aprovechado la devastación causada por este fenómeno meteorológico para impulsar una campaña marcada por la hostilidad, difundiendo noticias falsas, como un audio que denunciaba robos a personas que transportaban ayuda, o un video sacado de contexto que ocurrió en un retén en Aguascalientes. Estas acciones reflejan una falta de empatía y humanismo por parte de la oposición, ya que están dispuestos a convertir una tragedia en un botín político.
Frente a esta campaña, la semana anterior el presidente Andrés Manuel López Obrador presentó el plan de reconstrucción. Este plan consta de 20 puntos que buscan no solo restaurar lo que se ha perdido, sino también brindar apoyo a las personas afectadas y reconstruir las comunidades de una manera más sólida y resistente. Uno de los primeros y más destacados puntos del plan es el compromiso de brindar apoyo a los familiares de las víctimas del huracán y la intensificación de la búsqueda de los desaparecidos. En momentos de tragedia, el apoyo emocional y la búsqueda de seres queridos son esenciales para el proceso de duelo y la recuperación. Este enfoque en la atención a las personas es un testimonio de la humanidad y empatía que debe prevalecer en momentos de crisis.
El adelanto de dos meses en el pago de los Programas de Bienestar demuestra la comprensión para proporcionar ayuda económica inmediata a aquellos que lo necesitan. Además, aliviará la carga financiera de las familias afectadas y brindará tranquilidad. Por otra parte, la entrega de una canasta básica de alimentos por semana es un gesto que garantiza que las necesidades básicas de las familias sean satisfechas. Este apoyo ayudará a la población a recuperar cierta normalidad en medio de la devastación y a tener con alimentos para la subsistencia. La prórroga en el pago de Infonavit, Fovissste y del Seguro Social y la exención del servicio de luz durante varios meses aliviará la presión financiera sobre las familias damnificadas y les permitirá concentrarse en la reconstrucción de sus vidas y hogares.
El otorgar créditos a pequeños comerciantes y prestadores de servicios es una medida que fomentará la reactivación económica de la región. La inversión en la infraestructura de agua, drenaje, calles, hospitales y escuelas también es esencial para la recuperación en el largo plazo. Además, junto con la exención de impuestos, se aliviará la carga financiera de las empresas y fomentará la inversión y el crecimiento económico en la zona. Es de celebrar también la respuesta del Poder Judicial a la propuesta del presidente López Obrador para utilizar los fideicomisos con los que cuenta este último, para que se asignen a un fondo de apoyo para los damnificados de Guerrero. La aceptación de la propuesta implica un gesto de distención luego de varios meses de no llevar la mejor relación.
A raíz de los acontecimientos en Guerrero, se desprenden dos conclusiones, por un lado, la derecha parece no haber extraído lecciones de su pasado, lo que ha permitido que Claudia Sheinbaum mantenga su posición privilegiada de cara a las elecciones presidenciales. Por otro lado, a pesar de las adversidades, la solidaridad y el respaldo del gobierno desempeñan un papel vital en la recuperación de esta región golpeada por la tragedia.
POR ARTURO ÁVILA ANAYA
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