El sector agropecuario del país ha sido testigo mudo de la forma en que la producción de alimentos en México se ha visto afectada a consecuencia del cambio climático, pero también por la falta de apoyo que les permita poseer mayor tecnificación, una mejor comercialización y, en general, incrementar la competitividad para estar al mismo nivel que nuestros principales socios comerciales.
A fin de romper con el silencio ante ello, el pasado 23 de octubre se anunció el nacimiento de #PorNuestroCampo, movimiento que aglutina a la mayoría de productores agropecuarios.
El colectivo sale a la luz en un momento en que también sufren el impacto de factores como la inseguridad que se traduce en la extorsión, el robo de sus transportes y mercancías, y la disminución de los apoyos presupuestales para el año entrante.
Prueba de ello es que el Presupuesto Federal para 2024 contempla para la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) recursos por 74 mil 109 millones de pesos, monto que en términos reales es inferior a los del 2023. Sólo se aprobó un alza correspondiente a la inflación; un incremento en los rubros de Gasto Administrativo (+6.0%) y el Programa de Educación e Investigación con (+6.2%).
Además de la disminución en el presupuesto para el campo, la sequía golpeó drásticamente al sector, de acuerdo con el Grupo Consultor de Mercados Agrícolas GCMA, a nivel nacional mil 715 municipios registran algún grado de estiaje, y en algunas zonas del Noroeste, Norte, Centro-Norte, Pacífico Sur, Noroeste e Istmo de Tehuantepec, se registraron lluvias por debajo del promedio, por lo que persisten áreas con sequía de severa a extrema.
Por su parte, el Consejo Nacional Agropecuario CNA, coincide en que al mes de octubre, 73.6% de los municipios de la República se encuentran en situación de sequía, mientras que el 15.3% se encuentra en nivel de “anormalmente seco”. Es decir, solamente 11.1% de los municipios del país no tiene afectaciones.
De ahí que para encontrar una solución #PorNuestroCampo lanzó una convocatoria para que sociedad, gobierno, empresas se unan bajo las siguientes premisas:
- Buscar apoyo en financiamiento, comercialización y seguros; duplicar la inversión en infraestructura hídrica; y que las decisiones de gobierno que involucren al campo se tomen con fundamentos técnico/científicos y con la opinión de sus productores.
- Alzar la voz frente a la preocupación de que gobiernos de los tres niveles determinan las políticas públicas en función de las necesidades inmediatas de los grupos en el poder y sus compromisos.
- Encontrar alternativas a la eliminación de seguros y de la Financiera Rural.
- Eliminar el rezago en materia de infraestructura hídrica.
De acuerdo a los productores que aglutinan este movimiento la situación en el sector es muy compleja, requiere de soluciones innovadoras y responsables que pongan en el centro sus necesidades, demandas y experiencia pues se trata de un tema que debe ubicarse como de seguridad nacional.
POR MARIANA OTERO BRIZ
@BRIZCOCHO
EEZ