EN LOS MARES DE LA EDUCACIÓN

Abandono escolar en la EMS: ¿condena sin remedio?

En el ciclo escolar 2021-2022, la tasa de abandono en la EMS fue de 9.2 por ciento, según datos del Inegi, el valor más alto de todos los niveles educativos

OPINIÓN

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Antonio Argüelles / En los Mares de la Educación / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: El Heraldo de México

Octubre es un mes como cualquier otro en el calendario escolar, salvo en la Educación Media Superior (EMS). La razón es que, en ese momento del año, muchos de los jóvenes que acaban de entrar a ese nivel educativo abandonan la escuela. En el ciclo escolar 2021-2022, la tasa de abandono en la EMS fue de 9.2?%, según datos del Inegi, el valor más alto de todos los niveles educativos. Los estudiantes que cada año salen de la escuela anticipadamente se suman, así, a los casi nueve millones de jóvenes de hasta 24 años sin bachillerato, lo que representa alrededor de 40% de la población en este grupo etario.

Las causas de abandono que se citan más a menudo son las relacionadas con la falta de dinero, pero, como dicen Carlos Alberto Arellano Esparza y Ángeles Ortiz Espinoza, el “inconveniente al privilegiar este aspecto es que se podrían ignorar otras causas que son tan o más importantes en la decisión de la continuidad o el abandono”.

De esas causas sobresale, por un lado, que los planes y programas de estudio no tienen sentido para los jóvenes o no les interesan. Por otro lado, está la reprobación. En buena medida, ésta es resultado de la “brecha entre las escasas competencias con las que llegan gran parte de los estudiantes al bachillerato y las exigencias académico-propedéuticas” del nivel, como advierte el académico Eduardo Weiss.

El énfasis en las causas extraeconómicas no sólo permite diseñar políticas más robustas para evitar el abandono (que, con excepción del ciclo escolar 2020-2021, ha mostrado una tendencia a la baja en los últimos años); permite, también, idear mecanismos para atender a los nueve millones de jóvenes que han abandonado sus estudios. 

Los grados básicos de formación profesional en España ofrecen algunas pistas al respecto. Estos programas son ciclos formativos de dos años académicos que se dirigen a personas que no han completado la educación obligatoria y quieren proseguir su formación. Como reporta El País, aunque todavía hay desafíos, los grados básicos han logrado “reenganchar” a jóvenes que, de otra forma, se hubiesen quedado sin bachillerato.

Parte del éxito se debe a que los programas son de mayor interés y utilidad para los estudiantes. “Pasé de estar desmotivado y no querer estudiar a estar deseando que llegase el día siguiente para ir a clase y seguir aprendiendo”, declara al diario español un joven de 21 años. Cuando esto se suma a estrategias que ayudan a los estudiantes a llenar sus lagunas de aprendizaje y que apoyan a los docentes en sus labores, es posible ir más allá de la prevención del abandono y llegar a los millones de jóvenes que se creían perdidos. “Abandono” suena a sentencia definitiva, pero no lo es. Nunca es demasiado tarde en la vida para aprender, ni para cualquier otra cosa.

POR ANTONIO ARGÜELLES

COLABORADOR

@MEXICANO_ACTIVO

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