De llegar Claudia Sheinbaum a la presidencia del país en el 2024 se enfrentará a varios graves problemas heredados y a un sinfín de obligaciones y encargos (forzosos) del presidente López Obrador. Cumplirlos podría significar seis años de presiones y de arriesgar el caminar a callejones sin salida. Veamos algunos de esos “encarguitos”:
Obras emblemáticas. Veremos cómo cumple con estos compromisos. ¿Continuará la Dra. Sheinbaum buscando su plena terminación? Siendo una experta en temas ambientales ¿persistirá en la culminación de Dos Bocas y el apoyo al barril sin fondo que son PEMEX y CFE, a pesar de que México se ha comprometido a promover el uso de energías limpias? ¿El Tren Maya seguirá con apoyos irrestrictos a pesar del impacto ambiental (nunca evaluado técnicamente) que ha generado y generará? ¿Se evaluará su productividad y la recuperación de esta gran inversión? En el AIFA ¿Se dispondrá de los recursos para que este aeropuerto tenga al menos una mediana conectividad? ¿Los militares seguirán administrando y gozando de los beneficios de todas estas obras? ¿Por cuánto tiempo?
Incrementos en los programas asistenciales. Cada año crece la población de adultos mayores (somos un país que está envejeciendo aceleradamente) y exigirán se incrementen año con año (como hasta ahora) sus pensiones. Igualmente se incorporarán más y más jóvenes (preparados o no) al mercado laboral y muchos exigirán su “beca” ¿Será posible cumplir con todas estas demandas? La Sra. Sheinbaum tendrá que estar de acuerdo con ello.
Guardia Nacional a la Sedena. El traspaso de la GN de la disminuida Secretaría de Seguridad a la poderosa Sedena es, hasta el momento, cosa juzgada. ¿Continuará siendo así? ¿Ella opina exactamente igual que el presidente López Obrador en esta materia? Por lo pronto está obligada a intentar hacer este pase de llegar a la presidencia.
Cambios estructurales en el Poder Judicial. De esto ha hablado en numerosas ocasiones el presidente de México. Hasta ahora doña Claudia se ha mostrado de acuerdo. ¿Ella coincide en elegir por votación a los ministros de la SCJN, entre otros cambios sustanciales? ¿Está de acuerdo con una desdibujada división de Poderes? ¿Buscará un Poder Legislativo y un Poder Judicial dependientes del Ejecutivo?
Consolidar la militarización del país. Todo está dado en la actual administración para conseguir este objetivo y se ha avanzado mucho. ¿Sheinbaum apoyará el no regreso de los militares a los cuarteles? ¿Le interesa perseverar en esto? ¿Cree en la necesidad de contar con una fuerza policiaca bien capacitada, bien pagada o eficaz? Al parecer le será muy difícil dar un golpe de timón en este sentido.
En resumen, muchos piensan que la toma de decisiones de la Sra. Sheinbaum, en caso de ganar la presidencia de nuestro país está ya predeterminada por los fuertes compromisos adquiridos por el actual jefe del Estado, especialmente en temas de la mayor importancia para México. Claudia está al parecer comprometida y amarrada a un futuro del que difícilmente podrá escapar.
Eso sí, vamos a ver porque la historia nos ha enseñado que los candidatos, incluso los que parecen más leales, sufren una transformación al llegar a la presidencia. Este puede ser uno de esos casos. Pero no esperemos mucho, conociendo a esa cosa amorfa que se llama cuarta transformación el cambio puede ser para peor.
POR TERE VALE
COLABORADORA
@TEREVALEMX
MAAZ