UNA CHAIRA EN EL HERALDO

Cincuenta y veinteeeeeeee

Xóchitl todavía dudaba de aceptar la protección del Ejército durante la campaña y yo con toda sinceridad le recomendaría que aceptara

OPINIÓN

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Fernanda Tapia / Una Chaira en El Heraldo / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Foto: Especial

Una semana como esta de 1863, para ser exactos 3 de octubre… una recua de conservadores. Y hago aquí una pausa anticlimática para solidarizarme con mi Tlatoani de la Democracia y mejor les llamaré REACCIONARIOS. Prosigo: una punta de reaccionarios mexicanos de aquellas épocas, se lanzó a Miramar para ofrecerle a Maximiliano de Habsburgo, la corona del Imperio Mexicano que tanto añoraban. 

Según el Dr. Zagal, el “Maxi” tampoco venía tan engañado. Algunos historiadores lo pintan como infante al que le ofrecen una paletota y se la traga enterita. La mentira. Eso de que él llegara a tierra mexicana esperanzado de que sus habitantes lo esperaran con anhelo, necesitados de alguien de la realeza para guiar sus futuros, al parecer dista mucho de la realidad. 

Y la verdad es que tuvo muchos avisos, por ejemplo: su hermano el emperador de Habsburgo le advirtió que no viniera al continente americano si la flota inglesa no lo protegía y efectivamente la flota inglesa no lo respaldó. 

Y su suegrita, la mamá de Carlota, de plano se las cantó: “No vayan a México porque me los van a fusilar”. 

Y esta efeméride viene a cuento porque siglos después, muchos aspirantes y otros tantos candidatos se siguen aferrando a lo que quieren creer. 

¿En verdad Marcelo Ebrard pensaba que le ganaría a Claudia con todas las encuestas previas en contra? ¿Seguía aferrado a la idea de que “ya le tocaba”, porque alguna vez declinó ante mi AMLO? ¿En verdad Beatriz Paredes, con todo su colmillo, no se sabía usada para legitimar a la previamente elegida del Señor, bueno… del Señor… X? Doña Xóchitl Gálvez, ¿se habrá creído ya que podrá remontar más de 30 puntos de diferencia que señala la encuesta de Buendía & Márquez, para alcanzar a la doctora Sheinbaum? 

Xóchitl todavía dudaba de aceptar la protección del Ejército durante la campaña y yo con toda sinceridad le recomendaría que aceptara. Porque me dejó muy inquieta el hecho de que cuando tuvo una semana con declaraciones propias y ajenas que la empinaron, algunos comunicadores a sueldo del X. González, empezaron a manejar la versión de que la candidata “corría mucho peligro de ataques por parte de los seguidores de AMLO”. Para mí que ya les urgía una mártir. Y como hemos podido ver (en otros sexenios) que esos de la oposición hasta entre ellos se matan, no sería extraño que una mujer apartidista fuera utilizada como carne de cañón sacrificable. 

De todo corazón, ojalá Xóchitl pudiera hacer oír sus convicciones y su voz. Así como muchos dudan que la doctora vaya a hacer lo propio y no sea un títere de mi Jaguar de Macuspana. 

Con la pena pero yo sí creo, como dice Epigmenio Ibarra: “No hay héroes vivos y es que sólo esos a los que la muerte congela en el heroísmo, escapan a la seducción del poder. Pero López Obrador está hecho de otra pasta”. 

Claro que el león cree que todos son de su condición, pero para eso tendría que ser un Calles o un Salinas de Gortari. 

POR FERNANDA TAPIA
DENUNCIAS@FERNANDATAPIA.COM 
@TAPIAFERNANDA

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