En la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa hay dos exfuncionarios del PRI sumamente involucrados en el caso, pero sus nombres son intocables en la actual administración a pesar de sus responsabilidades directas en los hechos trágicos de la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre de 2014 en Iguala, porque han servido como informantes de Alejandro Encinas, subsecretario de Gobernación, para que éste arme su propia verdad histórica.
El adelanto de la nueva investigación, dado a conocer públicamente en fechas recientes, incumple la promesa del Presidente de la República para saber qué pasó con los estudiantes.
La nueva información está sesgada, pues a pesar de que los padres de los desaparecidos exigieron desde 2021 a López Obrador investigar a Enrique Galindo Ceballos, entonces director de la Policía Federal Preventiva (PFP) y actual alcalde de SLP, así como a Eugenio Imaz, entonces director del Cisen, así como a otros funcionarios, éstos se volvieron protegidos.
Además de que no existe una sola mención de ambos personajes en el nuevo proceso, Galindo e Imaz intervinieron de forma discreta en el armado de los recientes resultados.
Entre los suspirantes presidenciales se sabe que Galindo Ceballos es el artífice de involucrar personajes, entre ellos Jesús Murillo Karam y otros 17 ex funcionarios federales, en contra de quienes se configuraron diversos delitos de violaciones graves a los derechos humanos en materia de desaparición forzada de personas.
En este proceso los juegos políticos y consecuencias de la sucesión adelantada están presentes.
Todavía no se pueden hacer a un lado entre quienes aspiran a ganar la candidatura de Morena para 2024, pues en los pasillos del poder se habla de una estrategia de Encinas para debilitar a Claudia Sheinbaum al involucrar a determinados personajes, “en una reunión para fraguar la verdad histórica del presidente Enrique Peña Nieto” y de ese modo favorecer a la precandidatura de Marcelo Ebrard.
Las versiones, se dice, de Enrique Galindo Ceballos, entonces comisionado general de la extinta Policía Federal, terminaron involucrando, incluso a funcionarios con menor rango que él. Sobre Imaz, en el caso Ayotzinapa no hay mucho, lo más que se ha mencionado es que dejó desorden, simulación e ineptitud a pesar de los actos de tortura en contra de implicados en el caso, filmados por el área de inteligencia a su cargo..
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UPPERCUT: El PRI va más allá de ampliar el periodo a 10 años del Ejército en las calles, sino que Morena ha presionado a Alejandro Moreno a apoyar una iniciativa que impida a la SCJN invalidar normas constitucionales y secundarias para evitar que mediante una controversia de la oposición se inhiban las nuevas facultades a las Fuerzas Armadas.
POR ALEJANDRO SÁNCHEZ
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MAAZ