Grupo Pachuca ha sido sumamente criticado por el mismo gremio local. Cuando alguien tiene una visión diferente de las cosas, la resistencia al cambio, condición inherente al ser humano por el simple hecho de serlo, se hace presente y genera polarización. Sin embargo, los encabezados por Jesús Martínez con todo y críticas han dado resultados incuestionables. León llegó a cuatro finales en cinco años, y aunque Pachuca se ha diluido en gran parte por el poder adquisitivo de los demás equipos que ha ido creciendo, paulatinamente retoman el camino. Lo que es un hecho es que son protagonistas.
Uno de los rubros donde han cobrado más relevancia es la exportación de jugadores a El Viejo Continente. Érick Gutiérrez, Eugenio Pizzuto, Héctor Herrera, y más recientemente el caso de Daniel Aceves, quien fue potenciado por Guillermo Almada y bastaron seis meses jugando a gran nivel para irse al Oviedo.
Del que hablaré en esta edición es de Hirving Lozano. Un tipo que, por condiciones y edad, tenía todo para triunfar y que pintaba como la futura estrella del futbol mexicano. A los 22 ya estaba en Europa, y quizá pudimos pensar que se fue tarde, si consideramos que los grandes de la historia se van a las 19 o 20. Pero basta repasar su primera temporada en Países Bajos para desmitificar este hecho y haber pensado que pronto emigraría a una escuadra de envergadura. Sin ser delantero, hizo 17 goles y 11 asistencias en 29 partidos. Es decir, tuvo 29 participaciones directas solo en liga. Llegó el Mundial de Rusia 2018, y el tipo nos hizo gritar de felicidad cuando le anotó a Alemania, en lo que supuso un triunfo histórico para el Tri.
La siguiente campaña fue también interesante al registrar 17 goles y 11 asistencias en 30 encuentros.
En su estadía con el equipo granjero, registró en total 40 goles y 23 pases a compañeros. Una bestialidad para la posición que desempeña, pero todo ha ido a menos desde que pisó el sur de Italia con el Nápoli. En su primera campaña solo pudo contabilizar cuatro goles y una mísera asistencia en liga, una más en Champions. En la siguiente jugó 43 choques e hizo 15 goles y cinco asistencias, lo que parecía evidenciar un despegue, pero en su última temporada completa solo participó en 12 goles directamente.
Ahora la gente lo revienta, porque el equipo empezó goleando a todos y esa gran promesa mexicana apenas lleva una asistencia.
Ojalá retome el nivel o de lo contrario podríamos hablar de una estrella que poco a poco se va apagando, que empezó como un torbellino del otro lado del charco y ahora que tendría que ser el líder de su escuadra no ha podido lidiar con tal presión. Es joven aún para pensar en ser un histórico de nuestro balompié.
POR JOSÉ EDUARDO IGA
TITULAR DE ARREBATO DEPORTIVO EN EL HERALDO RADIO TORREÓN
@JOSE_IGA
MAAZ