Mario Delgado tiene un tuit fijado en su cuenta del pajarito, con un video del presidente Andrés Manuel López Obrador calificando la elección de congresistas de Morena –en las asambleas distritales del 30 y 31 de julio pasado, como “una buena jornada democrática porque participaron alrededor de dos millones 500 mil ciudadanos…, ¡son muchísimos!”.
Este fin de semana, el propio dirigente nacional de Morena sumó a sus festejos la celebración de asambleas semejantes en San Francisco y Los Ángeles, California, y festinaba: “Somos el único movimiento que traspasa fronteras. En México y en el mundo es un honor estar con Obrador”.
Nada de fondo dice, en cambio, del porqué su partido hubo de posponer los congresos estatales programados para este fin de semana que cruzamos (13 y 14 de agosto), fuera del raquítico aviso de la Comisión Nacional de Elecciones de Morena, el jueves pasado: los congresos estatales “se posponen”, dado que los resultados oficiales de las asambleas distritales deben darse a conocer dos días antes de la fecha establecida para su realización.
Lo cierto es que la “democrática” jornada electoral de Morena escurre lodo por todos lados.
Y ya no son tan sólo sus acérrimos críticos, John Ackerman –que denunció “fraude evidente” en todo el proceso y presentó toda una “expo fraude”–, y Alejandro Rojas –quien asegura de los 553 centros de votación, se acreditó que en 407 hubo fraude por acarreo y manipulación del voto–, sino que más inconformes se han sumado a las protestas.
De su lado, la Comisión de Honor y Justicia de Morena habría recibido a la fecha más de quinientas quejas de sus afiliados y el Tribunal Federal Electoral cerca de 80 impugnaciones, por causas que van desde la falta de cumplimiento en los requisitos, hasta la petición de nulidad del proceso completo.
Según datos recabados por la periodista Fabiola Martínez (La Jornada), de los 549 centros de votación, 64 han sido impugnados ante el TEPJF. Esto es, 11.66 por ciento.
En espera de los resultados de las asambleas estatales –no se sabe cuándo se darán a conocer, ni tampoco se ha informado si el Congreso Nacional, previsto para el 17 y 18 de septiembre, se mantiene en pie–, entre tanto, Ackerman ya tiene a punto la Segunda Convención Nacional Morenista para el próximo domingo 21 de agosto, en el Monumento a la Revolución.
Lo sucedido durante la elección de congresistas será, sin duda, el tema central.
El cochinero morenista saldrá a relucir en grande –al igual que en el Tribunal-, a menos que se logren acuerdos al interior del partido.
Y pronto. Cosa que se ve realmente difícil.
•••
GEMAS: Obsequio de Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México: “Las sequías nos alcanzaron, igual que en todo el país”.
POR MARTHA ANAYA
MARTHAMERCEDESA@GMAIL.COM
@MARTHAANAYA
CAR