REFLEXIONES CONSTITUCIONALES

Ariel y Calibán: Dos Mundos distintos

De la Obra “La Tempestad” de William Shakespeare, el magnifico escritor uruguayo José Enrique Rodo

OPINIÓN

·
Alfredo Ríos Camarena / Columna Invitada / Opinión: El Heraldo de MéxicoCréditos: El Heraldo de México

De la Obra “La Tempestad” de William Shakespeare, el magnifico escritor uruguayo José Enrique Rodo, escribió su famoso texto dedicado a la juventud de título “Ariel”. Aquí se pretende identificar dos visiones diferentes del mundo entre la América sajona y la América Latina.

El Rio Bravo es la frontera entre estas dos culturas antitéticas: una, la de Calibán, representa el utilitarismo, el materialismo y el afán del enriquecimiento; la otra, la de Ariel, se refiere a la grandeza del espíritu humano y la concepción de un mundo ideal. Estos personajes son representativos de estas dos identidades disímbolas que, sin embargo, en el mundo de nuestro tiempo tienen que convivir inevitablemente.

Estados Unidos de Norteamérica ha construido la sociedad capitalista, industrial, comercial y financiera mas grande del mundo, a través de la conquista militar y de las presiones económicas; no obstante, se encuentra sumida en grave crisis del Neoliberalismo actual.

México, a pesar de la similitud Constitucional entre ambas naciones, da nacimiento –a partir de la Constitución del 1917— a un proyecto de “justicia distributiva” que le da un carácter social a las garantías y que manifiesta una nueva definición de la propiedad privada, que debe estar sujeta al interés público. Este proyecto paradigmático ha entrado en grave crisis en los últimos 40 años; sin embargo, al parecer el Presidente Andrés Manuel López Obrador pretende renovar estos conceptos para enfrentar el Neoliberalismo y, para ello, se requiere –como condición necesaria— que la Política Energética esté en la Rectoría Estatal y que la nación mexicana tenga la propiedad del uranio, la electricidad, el petróleo y, ahora, del litio. Para mantener una civilizada relación México-Estados Unidos, se necesita entender con claridad histórica estos conceptos fundamentales.

En la próxima reunión entre los Presidentes Biden y López Obrador, debe prevalecer una atmosfera de respeto reciproco y de entendimiento mutuo, pues, si bien la Política Norteamericana ha sido de presión militar, hoy en día existen objetivos comunes, que imponen el imperativo categórico de una relación de provecho y éxito para ambas naciones.

Llega a la reunión de la semana entrante Joe Biden con graves problemas de aceptación, mientras que López Obrador conserva altos índices de reconocimiento; para los dos es necesario que los temas fundamentales de migración, seguridad, turismo, comercio internacional y política económica, encuentren puntos de identidad que beneficien a los dos pueblos.

Como siempre que se dan estos encuentros de alto nivel, miles de mexicanos somos solidarios con nuestro Presidente, independientemente de su signo partidario, pues lo que está en juego es el destino nacional, por encima de la polarización y las controversias internas.

La inmigración requiere, como lo ha señalado López Obrador, una relación de Estado para obtener visas de trabajo a los cientos de miles de mexicanos y centroamericanos, que aspiran al supuesto “sueño americano”.

La seguridad es un tema fundamental que transita, desde el perverso trafico de armas y personas hasta la acción criminal de los grupos, que se han apoderado de partes del territorio, como resultado de una política de “Seguridad Nacional” a la que nos ha obligado los Estados Unidos desde hace más de 40 años.

El turismo, la política ambiental y la necesidad de impulsar la producción para resolver la crisis que hoy nos afecta por la pandemia, la guerra en Ucrania y la inflación (hoy en México asciende a 7.99%), tienen que resolverse con respeto a la Soberanía y con participación igualitaria de ambos Estados.

Nuestra solidaridad al Presidente y nuestro deseo de que las próximas pláticas se realicen para bien de nuestro pueblo y del norteamericano.

POR ALFREDO RIOS CAMARENA

CATEDRÁTICO DE LA FACULTAD DE DERECHO DE LA UNAM

PRESIDENTE DEL FRENTE UNIVERSITARIO LATINOAMERICANO (1958-1962)

VICEPRESIDENTE DE LA SOCIEDAD MEXICANA DE GEOGRAFÍA Y ESTADÍSTICA

MAAZ