COLUMNA INVITADA

Premio a López-Gatell

Entre sus nuevas funciones, está la de emitir y coordinar la expedición de normas oficiales mexicanas

OPINIÓN

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Adriana Moreno Cordero / Columna Invitada / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

El haberle otorgado más facultades al subsecretario de Promoción y Prevención de la Secretaría de Salud, Hugo López-Gatell Ramírez, puede leerse de varias formas, y una de ellas suena, más bien, a premiar el magro desempeño que tuvo este funcionario durante la pandemia de COVID-19, así como a un desquite porque en la anterior administración, la de Felipe Calderón Hinojosa, el subsecretario fue despedido durante la amenaza causada por la influenza.

Ya rescatado en la actual administración, dado el papel protagónico que asumió el funcionario, se especuló de que podría ocupar la titularidad de la Secretaría de Salud que, por la vía de los hechos, ya estaba asumiendo, pero mal.

Entre las nuevas funciones de López-Gatell está la de emitir y coordinar la expedición de normas oficiales mexicanas en las materias de competencia de la subsecretaría de Integración y Desarrollo del sector Salud. 

Quizás, esto obedezca también a que el titular de la dependencia, Jorge Alcocer Varela, durante la pandemia de coronavirus SARS-CoV-2, se mantuvo impávido y silencioso, dejando todo el paquete a su alumno, quien no lo sacó de ningún problema, sino todo lo contrario, pues sus pronósticos en torno a la ruta que seguiría el COVID-19 en nuestro país fueron muy errados.

Recientemente, López-Gatell señaló que México ya iba de salida en esta quinta ola, justo cuando los contagios se han incrementado y la población tiende a relajar las medidas de prevención como el uso del cubrebocas, sí, ese que “sirve para lo que sirve y no sirve para lo que no sirve”, como dijera textualmente el subsecretario.

Durante una de las conferencias mañaneras, López-Gatell señaló que en la 14 semana de esta quinta ola, los datos preliminares indican que se está desacelerando la transmisión de COVID-19 en México.

No obstante, ni aún así, el que Jorge Alcocer se haya mantenido a lo largo de esta gestión en una gris opacidad, le ayudó a salvarse de las rechiflas que en los últimos días se ha llevado, aunque éstas respondan a otro tema: la situación que viven los médicos pasantes mexicanos que son enviados a zonas muy peligrosas a ejercer su servicio social y que ya ha tenido saldo rojo.

Hace unas semanas, y ante la exigencia de que se elimine el servicio social comunitario por ser una práctica de alto riesgo, el titular de la dependencia no lo consideró ni oportuno ni aconsejable, porque dichas prácticas profesionales son una necesidad académica que no se puede cancelar. 

Sin embargo, la Secretaría de Salud no está en capacidades para brindar a los pasantes condiciones mínimas para ejercer su servicio social, y para muestra basta comparar con los apoyos que les ha otorgado a los 54 médicos cubanos que llegaron a Nayarit.  

Tampoco hay infraestructura ni medicamentos, y esa carencia la padecerán también los galenos caribeños.

POR ADRIANA MORENO CORDERO
COLABORADORA
MORCORA@GMAIL.COM

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