La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA), junto con las empresas Microsoft y Aexa Aerospace trabajan por primera vez una nueva tecnología: la holoportación, utilizando la cámara Microsoft HoloLens Kinect y un ordenador personal con el software Aexa.
El nombre de holoportación proviene de los términos “holograma” y “teletransportación” y se trata de una tecnología de captura, que permite reconstruir, comprimir y transmitir en tiempo real modelos 3D de personas con alta calidad de imagen y elevado realismo.
Con esta tecnología se logró “holoportar” a las primeras personas a la Estación Espacial Internacional, el Dr. Josef Schmid cirujano del vuelo de la NASA y Fernando Peña Llaca, director general de Aexa Aerospace. Lo cual es una apuesta de la agencia espacial por una nueva forma de comunicación que mantenga lo más cerca posible a los astronautas con sus familias, médicos, ingenieros y psicólogos.
EL GRAN SUCESO
La holoportación se logró con la cámara Microsoft Hololens Kinect y una computadora personal con software personalizado de Aexa Aerospace, que ayuda a eliminar el fondo y recortar la silueta, lo que permite mostrar únicamente a la persona.
El Dr. Schmid se comunicó desde una habitación con suficientes cámaras para mostrar diferentes ángulos de su rostro. Posteriormente, los espacios de la habitación fueron eliminados, dejando únicamente a su cuerpo en la imagen. Desde la EEI, el astronauta Thomas Pesquet, que usaba auriculares de realidad mixta y un casco de realidad aumentada, esperaba la conexión con Schmid.
Al lograr el contacto, sus auriculares proyectaron la imagen en tercera dimensión del cirujano, haciendo parecer que él se encontraba en el mismo lugar.
Aunque nuestro cuerpo físico no esté en el espacio, nuestra “entidad humana” sí lo está y puede viajar hasta allí. No importa que la estación espacial esté viajando a 17.500 metros por hora y en constante movimiento en órbita a más de 400 kilómetros sobre la Tierra: en el momento en el cual la tecnología se activa, las personas atraviesan las distancias y están presentes en el lugar al que fueron holoportadas, indicó Schmid.
De esta manera, se completó el primer saludo de holoportación de la Tierra al espacio con alta tecnología.
DE LA FANTASÍA A LA REALIDAD
No solo se trata de una experiencia similar a una videollamada, quienes son holoportados están siendo filmados con múltiples cámaras en su ubicación real. Tampoco se trata solo del intercambio de información audiovisual, sino de una experiencia de interacción mucho más compleja.
La NASA explicó que sus usos principalmente serán para conferencias médicas privadas, conferencias psiquiátricas privadas, reunión con familiares, y llevar personalidades a la estación espacial para visitar a los astronautas. E indican que el siguiente paso tras este es combinar la holoportación con la realidad aumentada, para habilitar realmente la teletutoría.
Tal parecer que esta nueva forma de comunicación podría funcionar como precursora para un uso más amplio en futuras misiones espaciales. Los próximos pasos incluyen profundizar la comunicación bidireccional: las personas en la Tierra son holoportadas al espacio y los astronautas son colocados de regreso en nuestro planeta.
Otro punto interesante es que la holoportación y herramientas similares podrían tener grandes implicaciones en el futuro de los viajes al espacio profundo. Por ejemplo, a medida que avanzan los planes para las misiones a Marte, un obstáculo a superar serán los retrasos en las comunicaciones, que surgen durante el viaje hacia y desde Marte y se estiman en torno a unos 20 minutos.
En conclusión, está claro que, de momento, esto es un servicio que podemos considerar como algo reservado para propósitos muy específicos, y que tiene algunos desafíos como lo son los lentes, el software y las cámaras para quien desea ser holoportado, pero en un mediano plazo podremos ver que la masificación de este servicio sea una realidad.
Es la primera vez en la historia que un Humano en la Tierra se encuentra con un astronauta como si estuviera parado justo al lado de ellos.
POR JAVIER LÓPEZ CASARÍN
EXPERTO EN INNOVACIÓN
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