DES... PROPÓSITOS

China: Xi Jinping, desgastado

La economía del gigante asiático es una de los países más afectados por la pandemia, debido a su dependencia del comercio internacional

OPINIÓN

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Agustín García Villa / Des... Propósitos / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

Ante un escenario político agitado por la posible tercera reelección de Xi Jinping durante el XX Congreso del Partido Comunista Chino (PCCh) el próximo otoño, el país enfrenta desafíos económicos que pudieran complicar los planes del presidente.

En primer lugar, el problema de las disputas comerciales que ha enfrentado con el gobierno de EU desde las épocas de Trump, lo que ha significado menores flujos de comercio e inversión entre ambos países y afecta severamente la economía china, que no ha podido compensar esa pérdida. Habría que agregar los estragos económicos causados por el conflicto en Ucrania y la inflación.

En segundo lugar, la pandemia del coronavirus frenó el crecimiento económico mundial como no se había visto desde la “Gran Depresión”. Si bien fue un suceso espontáneo y generalizado, China fue uno de los países más afectados por su dependencia del comercio internacional. De tasas de crecimiento que a principios de siglo fueron de más de dos dígitos, está ahora en 5-6%, con serias repercusiones de empleo. La situación empeoró ante los brotes de Omicrón, que agravaron la política “Cero Covid” y al confinamiento de Shangai y otras zonas industriales y de negocios.

Un tercer problema surgió de la decisión de aplicar criterios económicos redistributivos del ingreso delineados por Mao Zedong y marginados los últimos 40 años. Así, Xi ha obligado a las grandes empresas a reintegrar parte de sus ganancias al PCCh, a fin de redistribuirlas entre las clases desfavorecidas.

Estos aspectos, pero sobre todo el último, generaron un gran desencanto entre las empresas chinas y de capital extranjero, acostumbradas a obtener grandes utilidades anuales, lo que ha inhibido nuevas inversiones y, con ello, propiciado una mayor desaceleración económica que ya afecta la posición política de Xi Jinping ante su pretendida tercera reelección.

Aún más delicado para es el resurgimiento de nuevos personajes, como el segundo hombre más importante en la política china, el premier Li Keqiang (66), quién ha presionado a Xi para que derogue la aplicación de lineamientos económicos de corte maoísta y permita que continúe el proceso de “occidentalización” del modelo económico, lo que ha significado un costo político para el presidente, pues las grandes corporaciones apoyan las gestiones que promueve Keqiang.

Él se ha distinguido por la coordinación de grandes proyectos económicos en China, así como por su papel en foros internacionales en los que se ha pronunciado por el desarrollo sustentable y la economía globalizada. Ha sido un convencido de las reformas desarrolladas desde la época de Deng Xiaoping, lo que se contrapone con las medidas de Xi Jinping.

Se dice que de no haberse modificado la Constitución para permitir que Xi pudiera ser reelecto, Li Keqiang hubiera sido su indiscutible sucesor, lo que ha generado inconformidades entre miembros del Politburó. Aún así, la mayor relevancia de Keqiang en los últimos meses pudiera frustrar la reelección.

POR AGUSTÍN GARCÍA VILLA

ANALISTA ECONÓMICO

MAAZ