No sé si José Manuel del Río Virgen, secretario técnico de la Jucopo del Senado, es culpable o inocente de homicidio, como lo acusa la fiscalía de Veracruz. Lo que se nota a kilómetros de distancia, con la información disponible, es que no hay elementos de prueba en su contra.
El viernes por la noche salió del penal de Pacho Viejo, donde estuvo detenido 178 días por meras especulaciones o conjeturas, si no es que por la consigna de alguien. Al integrante de Movimiento Ciudadano le fabricaron una acusación como autor intelectual del homicidio de Remigio Tovar, candidato de MC a la alcaldía de Cazones de Herrera.
El caso lo trasciende a él, y hay que incorporarlo en el contexto de lo que parece una cacería contra opositores al gobernador Cuitláhuac García, orquestada por el secretario de Gobierno estatal Eric Cisneros.
Desde que gobierna García, en Veracruz han sido detenidos 24 políticos. Todos, incómodos para el mandatario estatal. A Del Río Virgen le habría costado su cercanía con otro de los adversarios de García, el senador Ricardo Monreal, con quien el gobernador tiene un pleito abierto.
El legislador ha acusado a García de estar detrás del encarcelamiento de su colaborador; el mandatario estatal, sin nombrarlo, le lanzó un nuevo dardo en Twitter el jueves pasado: “Es lamentable que unos jueces federales insistan en torcer la ley a conveniencia del presunto homicida sólo porque tiene un amigo pudiente.
La parte buena es que ese ‘buen amigo’ ya quedó desenmascarado que sirve a la corrupción”.
La escalada en el pleito García–Monreal viene de tiempo atrás. El 19 de noviembre pasado, el senador denunció que el delito de ultrajes a la autoridad era inconstitucional. Dijo que no debía permitirse la violación a los derechos humanos, ante la privación de la libertad de varias personas en Veracruz. Señaló el caso de seis jóvenes que fueron detenidos. Ellos habrían estado en una plaza comercial, los detuvieron y fueron acusados de agredir con cuchillos a policías.
El 7 de diciembre, Monreal llamó al Poder Judicial de la entidad a no convertirse en cómplice. Una semana después, un juez federal ordenó dejar en libertad a los jóvenes.
Dos días después, Monreal denunció que el juez de control no los liberó. El senador pidió al juez federal acusar de desacato a los jueces locales y a la CNDH actuar. El 19 de diciembre, los jóvenes fueron liberados.
Al otro día Monreal envió un exhorto al Congreso de Veracruz para derogar el artículo 331 del Código Penal que establece el delito de ultrajes a la autoridad.
Tres días más tarde, fue detenido Del Río Virgen. Estuvo preso a partir de conjeturas; no había hechos ni testimonios que lo vincularan con el asesinato, según el juez.
El caso no se sostiene jurídicamente. ¿Alguien le pedirá una disculpa por arrebatarle 178 días?
POR MANUEL LÓPEZ SAN MARTÍN
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