La Organización Internacional del Trabajo calculó que aproximadamente de los 3,239 empleos existentes en áreas STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) en México durante el 2020, solo el 38% fueron ocupados por mujeres.1 Solo 3 de cada 10 profesionistas STEM son mujeres.2
La división por sexo en áreas profesionales ha promovido la masculinización de unas carreras consideradas más importantes e incentiva la feminización de otras, impidiendo que personas altamente capaces y calificadas ocupen cargos de trabajo que les permita explotar ese potencial y talento en un juego donde perdemos todos y todas, incluyendo a las empresas y al crecimiento de la economía en términos de productividad a causa del talento mal aprovechado.
Cuando una mujer rompe el techo de cristal en ciertos espacios, sabemos que se requirió el doble de esfuerzo que sus contrapartes masculinas para llegar a donde están hoy, por eso son merecedoras de nuestro reconocimiento y agradecimiento.
Es así como nos encontramos a dos mujeres abriendo brecha, Ana Galindo, la primera mujer en dirigir a la selección mexicana varonil, y Katya Echazarreta, la primera mexicana que fue al espacio.
Ana demostró tener la capacidad de dirigir a un equipo desde que formó parte de la dirección técnica como auxiliar en el América Femenil en 2017 para después ser parte del equipo técnico de la Liga MX Femenil en 2018. Un año después, como encargada del equipo femenil Sub 15, obtuvo la victoria en el Dallas International Girls Cup. Sus esfuerzos la llevaron a ser la primera mujer auxiliar en la categoría Sub 20 de la Selección Mexicana.3
También celebremos a Katya Echazarreta, la primera mujer mexicana y latinoamericana en viajar al espacio, ella estudió ingeniería eléctrica en un colegio comunitario y después de tres años se trasladó a la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA), donde hizo una pasantía en el Laboratorio de Propulsión a Reacción (JPL) en la NASA, un lugar en donde terminó trabajando tiempo completo. Katya ha establecido que su objetivo es lograr que México sea parte de la historia de la exploración espacial y al mismo tiempo ayuda a otras mujeres a triunfar en áreas STEM porque ha vivido de primera mano lo difícil que es romper con los estereotipos que te recuerdan un “no puedes lograrlo” de manera constante.4
Detrás de estos triunfos, existe capacidad y toda una lucha que les abrió camino. Este proceso evolutivo que hemos recorrido nos asegura que cada vez veremos a mas y mas mujeres cambiando la historia e inspirando a millones de niñas y mujeres para aspirar a todo lo que deseamos ser.
Laura Esquivel Torres
Secretaria Nacional de Promoción Política de la Mujer en el CEN del PAN
SSB