SILBATAZO INICIAL

¡Santos al infierno!

Santos tendrá 58 días, a partir de hoy, para tratar de subir al cielo, tras este torneo imperdonable

OPINIÓN

·
José Eduardo Iga / Silbatazo Inicial / Opinión El Heraldo de México

Ha finalizado la última fecha del balompié mexicano y si bien Tigres se instaló de forma directa en la Liguilla dentro de los primeros cuatro y Monterrey peleará para llegar a la misma de la mano de Víctor Manuel Vucetich, el norte del país ha sido contendiente en los últimos campeonatos, sobre todo, clasificándose en los ocho primeros y hoy, hay tres fracasos
consumados y que deberían poner a pensar a los dirigentes de esos lares.

Hoy me centraré en Santos. Dicen que las segundas partes normalmente no son buenas, y en el caso de este, dicho adagio fue efectivo con la irrupción de Pedro Caixinha. Si bien el estratega portugués quedó campeón en su primera etapa, y en su tiempo fue un técnico pionero dentro del futbol mexicano, mostró nula eficiencia para sacar adelante un proyecto de jóvenes. En La Comarca, lo que más se le criticó es que sólo podía hacer buenas cosas con estrellas dentro del campo. Promovió muy poco la competencia interna, pilar básico en cualquier escuadra, y se fue con solo dos puntos de 18 posibles, lo que terminó condenando a una escuadra que, al mando de Eduardo Fentanes, como interino, recuperó la memoria futbolística pero el daño ya había sido irreparable. 

Los guerreros llevan años con una filosofía institucional muy clara y que se encaminaba paulatinamente al éxito. Jugar por lo menos con el 33 por ciento de sus canteranos. Ello, incluso, le había llevado a exportar a Santiago Muñoz Gerardo Arteaga a Europa. Con Guillermo Almada, que dicho sea de paso robó la liga con el Pachuca, habían llegado a los cuartos de final el certamen anterior incluso superando a Tigres en lo futbolístico, quedándose fuera sólo por estar debajo en la tabla. 

Hace un año, alcanzaron la final con un grupo repleto de jóvenes y sus principales figuras lesionadas casi todo el tiempo. Pedro se encargó de mandar al diablo a dicha filosofía, sin promover la competencia interna, jugando con los mismos, aunque no funcionaran, dejando sin oportunidades a jóvenes como Jordán Carrillo, que siempre que entraba con Eduardo Fentanes le cambiaba la cara al equipo. Dante Elizalde y los suyos tendrán que analizar si se quedan con su cuerpo técnico institucional o traen a alguien de fuera que congenie verdaderamente con los valores institucionales, y por supuesto, analizar a fondo qué jugadores deben seguir y qué no, porque pese a los resultados positivos de semestres anteriores, ha habido algunos que llevan todo ese tiempo con una baja de rendimiento importante, como Eduardo Aguirre, que es puesto en un pedestal, pero que lleva con una pobre cantidad de goles y los pocos que ha metido han sido intrascendentes; las laterales tanto izquierda como derecha que están repletas de elementos que no juegan prácticamente nada, y por lo menos reforzarse con un futbolista clave en cada posición, para fortalecer la banca que se ha quedado bastante corta. 

Santos tendrá 58 días, a partir de hoy, para tratar de subir al cielo, tras este torneo imperdonable, porque la fanaticada se le voltea a una directiva, que piensan, ya prefiere a los del Atlas, mientras descuidan a su combinado.

POR JOSÉ EDUARDO IGA
TITULAR DE ARREBATO DEPORTIVO EN EL HERALDO RADIO TORREÓN
@JOSE_IGA

PAL

 

SEGUIR LEYENDO: 

Crucifixión...

Últimas escalas

Antagonismo regio….