Hace tres días se celebró el Día del Maestro. En México, hay 1.7 millones de docentes, pero tan sólo 14% se dedica a la educación superior, es decir, un poco más de 232 mil.
De tales maestros y maestras, solamente 36% cuenta con maestría y 17% con estudios de doctorado. Sobreviven con bajísimos salarios, siempre a merced de los alumnos y los padres de familia. La edad promedio de un maestro de universidad es de 47 años.
De acuerdo con la SEP y el documento Principales Cifras del Sistema Educativo (2019), de 125 millones de habitantes en nuestro país, 12 millones y medio están en edad de cursar un grado universitario. Tristemente, sólo 38% estudia en un nivel superior a la preparatoria. Ese dato significa cuatro millones 705 mil 400 estudiantes en todo el país, y de ese número, sólo se titula 23% , es decir, poco más de medio millón. El grado lo obtienen más mujeres, ellas: 285 mil 952 y, ellos: 239 mil 704.
La educación superior en México se divide en los siguientes niveles: Técnico Superior Universitario; Licenciatura; Especialidad; Maestría y Doctorado. De acuerdo con la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), hay 203 universidades en todo el país, 70% son públicas. En la República, los estados con mayor número de alumnos y alumnas es, en primer lugar, la Ciudad de México, donde estudian 437 mil; le sigue el Estado de México, con 288 mil; después Puebla, con 168 mil; Jalisco, en cuarto lugar, con 151 mil; Nuevo León, con 143 mil, y, finalmente Veracruz, con 129 mil. Muestra del perfecto coctel de la desigualdad.
Según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo del Inegi (2019), las principales áreas de estudio en México son Ciencias Sociales (Administración y Derecho), 29%; Ciencias de la Educación, 20%; Ingeniería y Construcción, 20%; Artes y Humanidades, 13%; Ciencias Exactas, 8%; Salud, 6% y Agronomía, 4%.
Es importante señalar, y que quede muy claro, que el nivel de educación se ve reflejado en el mercado laboral. Con tan pocos maestros y estudiantes en nivel superior, los niveles de competencia son insuficientes. Según el Foro Económico Mundial, México se ubica en el lugar número 100 de 144 en calidad educativa.
Tal vez al gobierno federal le parece más fácil contratar médicos de otros países que invertir en Educación Superior. El Presidente culpa a los gobiernos anteriores y al sistema neoliberal, pero las cifras prueban que en casi cuatro años de gobierno no estamos mejor, todo lo contrario; los jóvenes siguen abandonando sus estudios y no hay iniciativas de formación para el desarrollo profesional de los docentes.
¿Cómo puede este gobierno contribuir a la educación superior, si lo primero que hace el Presidente es descalificar a la UNAM? Aprovecho esta oportunidad para gritar, ¡Goya!
POR JORGINA GAXIOLA
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@JORGINA_GAXIOLA
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