El pasado 5 de marzo fue el día de la Eficiencia Energética, una recurrencia que toma siempre más peso y relevancia en el panorama mundial dada la necesidad y la urgencia de acelerar el proceso de transición energética y de descarbonización para reducir el impacto contaminante sobre el medio ambiente, y evitar el dramático escenario de una catástrofe ambiental.
Uno de los elementos claves para lograr estos objetivos es implementar las políticas y estrategias en el sector empresarial, sobre todo en el productivo.
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Así, las Pequeñas y Medianas Empresas (Pymes) toman un rol fundamental en el mismo, y México presenta una enorme área de oportunidad, ya que millones de estas empresas que se desenvuelven en el país requieren implementar políticas dirigidas a reducir su huella de carbono.
Sin embargo, ¿Cómo hacerlo? ¿Qué áreas atacar? Ante todo, se requiere de un plan estratégico para la reducción de la huella de carbono y, hablando de energía, uno específico para esta área.
Lo primero que se tiene que contemplar es el análisis de la situación en la cual se encuentra la empresa en sus consumos energéticos, así como los productivos.
De ahí, se inicia con el proceso de eficiencia energética en los procesos productivos, es decir, encontrar las áreas de oportunidad, en el mismo, para poder mejorarlo.
En paralelo con este proceso, se tiene que llevar a cabo otro análisis, el de ahorro y calidad de energía, es decir, revisar qué tipología de energía se está utilizando en su suministro y buscar alternativas más económicas y sustentables, como puede ser adquirir energías renovables en el mercado o generar las mismas en sitio.
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Al concluir estos procesos, la empresa está lista para el siguiente paso, que es la digitalización y automatización de los consumos energéticos, es decir, controlar de forma remota y en tiempo real el comportamiento de sus procesos productivos para que sean siempre los óptimos.
Los beneficios para las Pymes son múltiples: la reducción de huella de carbono en sus procesos productivos, competitividad y cumplimiento de estándares internacionales y ahorros económicos, aunque el más importante es desarrollar productos con impacto cero al ambiente.
¿Es el futuro? No, eso es el presente.
¿Cuándo iniciar? ¡HOY¡
POR PAOLO SALERNO
Managing Partner de Salerno y Asociados
@PAOLO_SALERNO Y @SA_ENERGIA
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