La familia es una institución social indispensable para el desarrollo del ser humano, porque es un espacio seguro, de amor y apoyo incondicional, donde se proporcionan aprendizajes y valores. También es un refugio en tiempos difíciles y, en la época navideña, te da sentido de pertenencia.
Sin embargo, de acuerdo a datos de la Unicef, México es el segundo sitio en orfandad infantil en América Latina. Hay 1.6 millones de niñas y niños que no tienen un hogar, mientras 22 mil 742 residen en casas hogares (RELAF), el resto probablemente se encuentre viviendo en situación de calle, hecho que las y los priva de su derecho a vivir en familia.
Existen estudios que señalan que la niñez que ingresa a casas hogar, con edades que van de los cero a los seis años, permanecen durante largos períodos, lo que da como resultado que tengan, hasta cierto punto, afectaciones en su desarrollo cognitivo.
Si bien, las instituciones trabajan y hacen lo mejor para brindar cuidados a este sector de la población en la medida de sus posibilidades, cada infante requiere de atención personalizada y ciertas condiciones que solamente una familia puede otorgar.
A pesar de que los gobiernos, así como instituciones públicas y privadas han realizado esfuerzos para apoyar a la población infantil que vive en orfandad, existe una tarea pendiente que tenemos como sociedad: abrir nuestra mente a la adopción, pues aún existen muchos retos para adoptar.
En primer lugar, sólo se busca la adopción de bebés, lo que le resta la oportunidad a niñas, niños y adolescentes de tener un hogar, pero existen historias maravillosas como la de Jimmy Butler, una de las actuales superestrellas de la NBA y líder del equipo Miami Heat.
Jimmy Butler fue abandonado por su padre al nacer, y cuando tenía 13 su madre lo corrió de su casa, por lo que permaneció durante cuatro años sin hogar, hasta que fue adoptado por la familia de su mejor amigo, Jordan Leslie.
El mensaje de esta historia es que, con el gran apoyo
y el amor brindado a niñas, niños y adolescentes, se les
permite el desarrollo de sus talentos, así como cumplir
sus sueños.
Otro reto es la lentitud en los trámites. En este sentido, la Fundación Grupo Andrade proporciona el apoyo legal para agilizar la adopción de las niñas y los niños que se encuentran bajo la custodia de la Fundación Unnido; además, brinda recursos económicos para que, durante su estancia en dicha fundación, tengan las condiciones óptimas para su crecimiento, un ejemplo es que, en esta temporada navideña, de la mano de su voluntariado, organizaron una posada para que cada una de las niñas y los niños pudiera disfrutar de esta linda tradición.
Si buscas adoptar o contribuir con el bienestar de la niñez que no cuenta con un hogar, visita la página de Fundación Grupo Andrade: https://fundaciongrupoandrade.org.mx/
POR DULCE GALINDO VILLA
@FUNDACIONGRUPOANDRADE
PAL