Todos los que hemos tenido la necesidad de ir de un lugar a otro en estos tiempos, apreciamos el gran e inigualable valor del Sistema de Posicionamiento Global, conocido como GPS (por sus siglas en ingles: Global Positioning System).
Quienes ya pasamos de cinco décadas, tuvimos experiencias de ir por rutas equivocadas, tardadas, complicadas o simplemente perdernos, ante la gran variedad de caminos que se nos presentaban en los trayectos para llegar a los destinos, y que se empeoraban ante una mala señalización, una persona que daba mal una referencia en el camino, o el típico “yo sé como llegar”, seguido horas después de un “yo pensé que aquí era el camino, pero no lo es”.
Las consecuencias de esto generaban grandes malestares e inconvenientes. Desde no llegar a la cita o celebración, pasando por el gasto innecesario de tiempo y gasolina, hasta terminar en lugares donde la seguridad era cuestionable.
Pero llegó el GPS, y la vida nos cambió. Hoy en día, cualquier teléfono celular tiene aplicaciones con esta tecnología que nos indica no sólo cómo llegar en forma más rápida y conveniente, sino que además nos alertan de accidentes, trabajos, bloqueos, hasta policías y radares que se encuentran en las cercanías.
Resulta claro que nuestros proyectos de todos tipos, incluyendo los de infraestructura, son eso: trayectos de un lugar a otro. Comenzamos con una idea conceptual en la mente, una hoja en blanco y múltiples ideas que tratan de lograr ubicarse en la realidad y viabilidad de los hechos, que finalmente lograrán ser una carretera, un hospital, un puente, un aeropuerto o alguna otra instalación para cumplir con satisfactores privados o públicos.
Las personas regularmente piensan que el inicio de esos proyectos es con “la primera piedra” (el momento en el que el político en turno quiere aprovechar para decir que sus promesas están en camino de cumplirse…), sin embargo, para llegar a ese hito, es necesario que decenas o cientos de mentes lleven a cabo las tareas de planear, diseñar y programar (entre muchas otras actividades intelectuales), la forma en que ese proyecto logrará convertirse en realidad. Y esa labor es precisamente la consultoría.
Por eso, la Cámara Nacional de Empresas de Consultoría se refiere a esta última como “la industria del conocimiento”, porque a través de la misma se pueden llevar a cabo acciones necesarias para que esa idea conceptual se convierta en una realidad palpable a través de conocimiento especializado y experto.
Lo anterior inclusive, después de la famosa “primera piedra”, la consultoría continúa agregando valor a los proyectos a través de la gerencia de proyectos, supervisión, dirección arquitectónica, prevención de disputas, entre muchas otras opciones que la consultoría ofrece para que nuestras obras sean exitosas.
En este sentido podemos afirmar que la consultoría es el GPS de los proyectos, pues permite guiar a los interesados en la mejor forma de que ese concepto abstracto llegue a ser la realidad esperada con los menores inconvenientes.
Lamentablemente en momentos en los que la materialidad resulta ser predominante y que las finanzas son escasas, la consultoría es la menos requerida, cuando en realidad debiera de ser la más deseada.
¿Cómo puedo llegar a tiempo a la boda? ¿Cómo puedo tomar el menor camino para gastar menos gasolina y desgaste para mi automóvil? ¿Cómo puedo tomar los caminos que no resultan ser peligrosos e indeseados? ¿Cómo puedo hacer que el trayecto sea lo más eficiente posible en todos los sentidos: tiempo, costo y demás elementos que una mala decisión implica?
Pues este ejemplo simple nos permite ver que la consultoría, como el GPS de los proyectos, facilita el desarrollo de los mismos. En tiempos de crisis, ahorrar en centavos esenciales, es tener el riesgo de gastar miles pesos innecesariamente.
Recordémoslo bien: la consultoría es el GPS de proyectos y debemos aprovechar sus beneficios en la misma forma en que sabemos que abrir nuestro GPS nos llevó por el camino que permitió llegar a nuestro destino sanos y salvos.
POR ROBERTO HERNÁNDEZ GARCÍA
VICEPRESIDENTE DE ENLACE LEGISLATIVO DE LA CNEC
@CNEC_MEXICO
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