COLUMNA INVITADA

Celebramos el 75 aniversario del Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio

A pesar de los retos cada vez más complejos que tiene el sistema multilateral de comercio, no podemos negar el impacto del comercio mundial en el impulso de la prosperidad en todo el mundo

OPINIÓN

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José Ignacio Zaragoza Ambrosi / Columna Invitada / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

El 30 de octubre de 1947, 23 países firmaron el acta final del Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio, mejor conocido como GATT, acuerdo temporal que impulsaría el comercio internacional y que terminó regulándolo por durante casi 50 años antes de ser sucedido por el nacimiento de la Organización Mundial del Comercio en 1995. Sin embargo, el GATT todavía existe como el tratado general de la OMC para el comercio de bienes.

Se cumplen setenta y cinco años de su creación para velar por el buen funcionamiento del comercio internacional, como medio de asegurar el crecimiento de los países que integraran el organismo. Lo que en un principio se pensó como algo estable y permanente, tuvo que ser sustituido por un acuerdo provisional, que en cierto modo podía ser interpretado como una ventaja, dada su mayor flexibilidad y la posibilidad de que en cada una de las rondas de negociación se pudieran sumar más países.

En 1948 entró en vigor y sus objetivos prioritarios se establecieron en la mejora del nivel de vida, la consecución del pleno empleo, el mejor aprovechamiento de los recursos naturales, el desarrollo de la producción y los intercambios internacionales y el fomento del desarrollo económico a través de la reducción progresiva de las barreras al comercio.

Los principales beneficios alcanzados durante estos 75 años son: 

  • El fomento del comercio internacional: El GATT redujo los aranceles, lo que impulsó el comercio entre países. A medida que comerciaban más libremente entre sí, más países vieron los beneficios del libre comercio y quisieron unirse al acuerdo. Cuando el GATT fue reemplazado por la OMC, más de 100 países se habían sumado a los 23 signatarios originales.
  • Redujo la probabilidad de guerra: al aumentar el comercio, el GATT promovió la paz mundial y preparó el escenario para la Unión Europea y ayudó a prevenir guerras entre sus miembros. La idea general que mantiene es que, si su economía depende del comercio con otro país, es menos probable que entre en guerra con ese país. Cuantos más países comercian entre sí, menos probable es que haya una guerra.
  • Mejoró la comunicación: además de reducir las posibilidades de guerra, el GATT proporcionó incentivos para que los países se comunicaran mejor entre sí. Incluso los ciudadanos promedio tienen más probabilidades de aprender un idioma extranjero en estos días, ya que les permite acceder a mercados de consumo más grandes que los que tienen a nivel nacional. 

En la reciente celebración llevada a cabo en la OMC, la Directora General Adjunta, Anabel González, dijo que la durabilidad del GATT se debe en gran parte al hecho de que se basa en principios simples, como la no discriminación, la reforma gradual a través de sucesivas rondas de negociaciones y la flexibilidad en forma de excepciones que permiten a los miembros espacio para las políticas internas. Y subrayó que el 75 aniversario debe ser un recordatorio de que el GATT es una herramienta de cooperación internacional que ahora es más necesaria en vista de las múltiples crisis que afectan al mundo.

Por su parte, el profesor de Economía del Colegio John French del Dartmouth, Douglas Irwin expuso algunas de las diferencias entre el sistema multilateral de comercio, salvaguardado por la OMC, y el GATT, destacando en particular el sistema de solución de diferencias de la OMC: el sistema de comercio mundial está firmemente arraigado en el orden geopolítico actual; el camino ha sido largo y duro, pero los beneficios han sido enormes; y advirtió que un retorno al nacionalismo económico y la fragmentación no solo es económicamente muy costoso sino un gran peligro sobre todo para los países en vías de desarrollo o los menos favorecidos. 

A pesar de los retos cada vez más complejos que tiene el sistema multilateral de comercio, no podemos negar el impacto del comercio mundial en el impulso de la prosperidad en todo el mundo, basta decir que desde el establecimiento del GATT ha sacado a más de mil millones de personas de la pobreza, y eso nos dice que ha valido la pena. 

POR JOSÉ IGNACIO ZARAGOZA AMBROSI
EXPERTO EN COMERCIO EXTERIOR
@IGNAQUIZ

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