ORBITANDO

Incertidumbre, favorita en Brasil

No hay plazo que no se llegue ni fecha que no se cumpla; es el caso de Brasil

OPINIÓN

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Israel López Gutiérrez / Orbitando / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

No hay plazo que no se llegue ni fecha que no se cumpla; es el caso de Brasil, que la próxima semana regresará a las urnas para definir si quiere cuatro años más del ultraconservador Jair Bolsonaro o decide apostar por el ya conocido izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva.

En esta ocasión, es probable que las encuestadoras no se arriesguen a diagnosticar a un triunfador. Si alguien perdió en la primera vuelta electoral fueron ellas, algunas firmas avizoraban una avasalladora derrota para Bolsonaro, pero nada más alejado de la
realidad.

Por el contrario, aunque parezca trillado, Bolsonaro en ese primer capítulo consiguió 43.23 por ciento de los votos frente a 48.4 por ciento que alcanzó Lula, con lo cual, perdió ganando y ahora puede alcanzar y rebasar a su rival político. La votación de la primera vuelta también nos mostró que Brasil está hoy más polarizado que nunca. Un norte y noreste que apuestan mayoritariamente por Lula da Silva y un sur y sudeste que dan su voto a Bolsonaro.

Es verdad que Lula vuelve a liderar en las encuestas, pero no se debe confiar y en caso de ganar iniciará su gobierno con un Parlamento de mayoría conservadora, será su primer gran reto, se enfrentará en más de una ocasión a sus adversarios políticos, que seguramente tendrán como prioridad obstaculizar su gobierno.

La formación de Bolsonaro, el Partido Liberal (PL), tendrá la mayor bancada de la Cámara de Diputados, con 96 escaños. La Cámara baja tiene 513 asientos, pero para el Partido de los Trabajadores (PT) de Lula será casi imposible construir una mayoría, la mayoría estarán en el margen que va del centro a la extrema derecha.

No hay que olvidar que sobre Lula pesan los escándalos de corrupción del pasado, de él y del PT, incluso varios de sus excolegas han pisado la prisión por el caso Lava Jato, una trama de sobornos multimillonarios. Se estima que sólo la constructora Odebrecht distribuyó sobornos por unos 800 millones de dólares en varios países.

Un total de 174 personas fueron condenadas en el país sudamericano, según el último balance publicado por la fiscalía en enero. Y para incomodidad de Lula, el magistrado Sergio Moro fue electo como senador: es el personaje que destapó la mayor red de
corrupción de Brasil y llevó al arresto del expresidente en 2018.

Por el lado de Bolsonaro, su gestión de la pandemia de COVID-19, dejó 660 mil muertes y se le responsabiliza por dos tercios de los fallecimientos debido a los retrasos en la compra de vacunas y al impulso de medicamentos no comprobados. Además, hay fuertes críticas por su nula política de protección de la Amazonia. Con sus decretos, el ultraderechista hizo aumentar de 117 mil a más de 673 mil el registro de cazadores, tiradores deportivos y coleccionistas, más alto que el número de policías (406 mil 384).

En Brasil para nadie es un secreto a dónde les aprieta el zapato a los aspirantes presidenciales, y a partir de eso, el próximo 30 de octubre, regresarán los brasileños a las urnas para definir quién tomará el timón de los próximos cuatro años. Como pintan las cosas, el ganador se asegurará de cuatro años al frente de un país enojado y dividido.

POR ISRAEL LÓPEZ
COLABORADOR

ISRAEL.LOPEZ@ELHERALDODEMEXICO.COM

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