COLUMNA INVITADA

Las presiones energéticas en el mundo, otro riesgo más para el economía nacional

Analistas del sector identifican como causa principal de esta crisis que se redujeron las reservas

OPINIÓN

·
Luis Miguel Martínez Anzures / Colaborador / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

Durante 2021 las regiones europea, norteamericana y asiática registraron un aumento en el precio de los combustibles y otros bienes básicos en el marco de la pandemia y la transición energética que ha generado diversos efectos colaterales en el comportamiento de las economías del planeta. Muchos son los temores que rondan alrededor de este fenómeno por parte de los inversionistas y los mercados bursátiles que ya han comenzado a impactar de manera negativa a diversos sectores productivos para casi todos los países del orbe internacional.

Ante este escenario de incertidumbre y volatilidad, es necesario tratar de vislumbrar e identificar el origen de estos efectos con el objetivo de preparar de mejor manera a la Administración Pública nacional y el rumbo que habrían de tener las políticas públicas que el país necesitará ante esta amenaza latente.

Analistas del sector identifican como causas principales de esta crisis energética global que, en el invierno pasado, se redujeron las reservas de manera sustancial y, sobre todo, la gradual transición de gas natural, carbón y petróleo a energías renovables, la cual está generando un desbalance entre el consumo de energía —que ha vuelto a niveles anteriores a la pandemia— y la capacidad de generación, lo que acorde con las leyes de mercado, ha originado un incremento en los precios.

De acuerdo con la Asociación mexicana del Gas Natural: “El verano y el invierno son las temporadas en que la demanda se incrementa ya que se requiere de mayor electricidad para usar el aire acondicionado y calefacción, por lo que como cada año los precios continúan al alza. Sin embargo, el fenómeno que vivimos está ligado también a los desequilibrios en las cadenas de suministro”.

El problema es que romper con esta inercia, no es tan sencillo, ya que de acuerdo con los especialistas todas las cadenas de suministro están vinculadas de una u otra manera, con el comportamiento en el precio de los energéticos, lo que genera una relación directamente proporcional entre los combustibles y los productos de diferentes sectores de la sociedad.

¿Y cuál sería el panorama para el futuro en la generación de energías renovables?

De acuerdo con un artículo elaborado por el editorialista Fareed Zakaria en The Washington Post, se necesitaría de un aumento de dos mil 500 por ciento en la producción para que la energía solar y eólica logren reemplazar por completo a los combustibles fósiles en el mundo, lo que no sucederá en los próximos años, debido a la falta de voluntad de algunos gobiernos para llevar a cabo la construcción de la infraestructura necesaria para llevar a cabo esta transición.

En el caso del gas natural, explicó la Asociación Mexicana del Gas Natural, es un combustible clave en la transición energética debido a su disponibilidad y su menor impacto ambiental. Además, es fundamental para la generación de electricidad y un insumo fundamental para la industria de la manufactura.

Pero en el mercado de los futuros índices bursátiles de Nueva York, este combustible aumentó más del 100 por ciento de 2020 a 2021, y casi un 80 por ciento del gas natural que circula en gasoductos nacionales es importado de Estados Unidos, por lo que su producción en territorio nacional, debería ser una prioridad de Seguridad Nacional para los siguientes años, ya que la soberanía energética, no debería ser un tema de polémica o debate, sino un objetivo de política pública aspiracional y prioritario, para cualquier administración que llegará a la titularidad del gobierno mexicano.

POR LUIS MIGUEL MARTÍNEZ ANZURES
PRESIDENTE DEL INSTITUTO NACIONAL DE ADMINISTRACIÓN PÚBLICA

CAR

Sigue leyendo

Del nacimiento de la Agencia Nacional de Aduanas

Lecciones de Seguridad Nacional

Alemania sin Merkel