En los albores del 2020, justo en el momento en el que se creía imposible que el intercambio y la integración global pudieran detenerse, la pandemia de COVID-19 obligó a las empresas y trabajadores a hacer una pausa que nos llevó a una de las peores recesiones económicas de las que haya registro.
Si bien los gobiernos y la iniciativa privada han trabajado a marchas forzadas para promover la recuperación económica, seguimos enfrentando la emergencia sanitaria con los impactos económicos correspondientes.
De todos depende avanzar más rápido hacia la recuperación; las y los trabajadores siguiendo las instrucciones de las autoridades sanitarias y completando los esquemas de vacunación. Los empresarios y gobierno también han desarrollado estrategias que lleven a promover a nuestro país como un destino en el que se puede confiar para invertir capitales que produzcan nuevos empleos.
Este es el caso de la Expo Dubai 2020 en la que México está presente desde octubre del año pasado, cuando se inauguró el pabellón de nuestro país en esa ciudad del medio oriente.
Este espacio permanecerá abierto hasta finales de marzo de este 2022. Serán 6 meses en los que -además de dar a conocer nuestra riqueza cultural- se promoverán negocios que apoyen a detonar inversión y generar empleos.
Es a través de estas exposiciones internacionales que nuestro país tiene la oportunidad de llevar el trabajo de artesanos y mujeres textileras a los ojos del mundo, reunidos en un solo lugar por poco tiempo; solamente en la Expo Dubai se encuentran representadas 190 naciones.
Asimismo, las megaobras que demuestran el enorme potencial nacional que ya se detona en el sexenio del Presidente Andrés Manuel López Obrador, como los casos del Tren Maya y el Corredor Transístmico, son una abierta invitación a que los grandes desarrolladores vean a México como un país seguro para los grandes capitales y con objetivos de desarrollo muy claros.
Como líder de la mayor central obrera del país, CATEM, aplaudo el hecho de que el sector público y la iniciativa privada en conjunto hayan logrado armar una estrategia de difusión clara y contundente. Este es el resultado de muchas manos que hoy buscan posicionar el nombre del país, con beneficios para las y los trabajadores.
Debemos estar orgullosos de que, a más de 14 mil kilómetros de distancia, cientos de miles de personas de todo el mundo están admirando y conociendo el trabajo de manos mexicanas, al tiempo que se destacan las oportunidades de establecer nuevas empresas, pues ya tienen garantía de que la mejor mano de obra está aquí, en México.
Pedro Haces Barba
Secretario General de CATEM
MAAZ