Fustigar desde el peldaño de una supuesta superioridad moral, culpar a autoridades pasadas de los crímenes del presente. La arrogante irresponsabilidad de clamar por abrazos en lugar de una justicia expedita para todos; de señalar con su dedo flamígero a la vaga descripción del “neoliberalismo”, siendo que hay responsables directos en diferentes niveles de gobiernos actuales, todos morenistas.
Nadie lo culpó a él, pero el querer excusar a las autoridades lo volvió copartícipe, pues minimizó un delito. Ante la barbarie, el dechado de virtudes, quien lograría el cambio inmediato sólo gracias a su nombramiento, prefirió culpar a los de antes, sin darse cuenta de que parte de esos anteriores son los de su propio equipo. La CDMX ha sido gobernada por la izquierda desde 1997, incluyendo el tiempo en que él, López Obrador, fue jefe de Gobierno.
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Si bien su intención es achacarlo al “neoliberalismo”, lo cierto es que el hecho de desenterrar a un bebé, llenarlo de droga, meterlo en un penal y terminar desechando su cuerpo en un basurero, es culpa de quienes se rehúsan a fortalecer el Estado de Derecho. Culpa de quienes culpan a otros. La descomposición de la sociedad inicia en el gobierno, donde se niega la realidad con otros datos y no se realiza ninguna acción para detener la violencia rampante. Tuvo que alzar la voz Saskia Niño de Rivera y su ONG, Reinserta, para que el gobierno volteara a ver la tragedia.
Aunque eso sí, primero se utilizó la negación y uno que otro dijo que se trataba de un comploj urdido contra la 4T. Una vez que el volumen de las redes sociales y la indignación ciudadana alcanzó niveles difíciles de silenciar, fue cuando la autoridad tomó cartas en el asunto. En Puebla, las órdenes de aprehensión se siguen acumulando. Van 23 giradas en contra de funcionarios estatales involucrados en la aparición del cuerpo del bebé Tadeo en el penal de San Miguel, además de despidos a superiores jerárquicos del sistema penitenciario.
La violencia no inició este sexenio, como tampoco la corrupción o los muchos problemas que aquejan a nuestra patria, pero fue con base en que podría cambiar la realidad como Andrés Manuel convenció a 30 millones para que votaran por él. Ahora, a poco más de la mitad de su sexenio, continúa culpando al pasado. Tan sólo en la CDMX, de 2018 a la fecha, han desaparecido más de 100 bebés, de los cuales 48 aún no han sido localizados. Las autoridades son las responsables.
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Cínico decir que el caso de Tadeo es atípico… Dado que lo suyo es la propaganda, el poder, la polarización y la palabra vacua, que López Obrador utilice el atril de la mañanera para exigir encontrar a los responsables físicos e intelectuales de esta barbarie. A él si le harán caso. Pero nada conmueve al Ejecutivo federal.
El crecimiento de familias en pobreza, los millones de contagiados, los cientos de miles de muertos por la pandemia y por la violencia. Ni el asesinato de una periodista, ni el uso de un bebé. Tampoco el clamor de quienes suplican por medicinas.
POR VERÓNICA MALO
VERONICAMALOGUZMAN@GMAIL.COM
@MALOGUZMANVERO
MAAZ
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