Estoy comenzando a leer “The power” de Naomi Alderman y rescaté esta cita como una analogía para identificar aquella energía que habita en nosotros y en la tierra, que sigue órdenes hasta que ya no puede contenerse y después, se revierte.
“La energía siempre adquiere la misma forma, la de un árbol. Esa misma fuerza se forma en nuestro interior, en nuestros árboles internos hechos de nervios y vasos sanguíneos; la energía viaja por nuestro interior igual que en la naturaleza. Las órdenes van desde el centro hasta las puntas, las consecuencias van de las puntas hacia el centro.”
El mundo avanza hacia un punto, otros buscan retroceder; el planeta está sufriendo graves daños por el cambio climático. Mientras otros países proyectan sus avances en convenciones y cumbres mundiales como la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26), las acciones de México reflejan la falta de ambición y compromiso hacia esta emergencia.
Comenzando con la extinción del Fondo para el Cambio Climático, seguido de la reducción en la asignación de presupuesto para el “Anexo Transversal en materia de mitigación y adaptación del cambio climático”, al que se destinará 1.1% del presupuesto este 2021 en comparación con la política energética basada en fuentes fósiles, que concentrará el 11.6% de recursos.
Datos del “Centro Mexicano de Derecho Ambiental” (CEMDA) revelan que en el quinto aniversario del “Acuerdo de París”, México no estableció nuevas metas, únicamente reafirmó las metas de 5 años atrás (reducción del 22% de gases del efecto invernadero y 51% de carbono negro), contrario al principio de progresividad que se busca.
Pero ahora no solo se reduce el presupuesto al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), tan necesario en nuestro país; se han presentado denuncias ante la PGR a 31 científicos por supuestos delitos de operación con recursos de procedencia ilícita y delincuencia organizada. Ante tal situación, 31 premios nacionales de artes y ciencias se han unido al repudio por las órdenes de arresto a científicos, además de 36 médicos y más de 200 académicos.
En el libro mencionado, Naomi Alderman señala que hay dos maneras de cambiar la naturaleza y el uso de la energía humana, una es que salga una orden de Palacio, una instrucción para que la gente diga “es así”, pero la otra, la más segura, la más inevitable es que esos miles de puntos de luz envíen cada uno un mensaje nuevo. Cuando el pueblo cambia, el palacio no puede aguantar.
Miremos hacia dónde va el mundo, en México no debemos quedarnos atrás, el apoyo a la comunidad científica para seguir trabajando en mejoras a la salud, educación y cambio climático requiere de todas las voces que sean necesarias, actuemos antes de que la energía del planeta se vuelva en contra.
Pd. Hablando de palacios, representantes del Consejo Nacional de Jóvenes Pro México (CONAJOMX) estuvieron presentes en la 6ta edición del “Global Youth Leadership Forum (GYLF)” bajo el título “La Unión Europea como actor global en el mundo post-COVID19”, celebrado en el Palacio de la Magdalena, en Santander, España. La invitación a este evento impulsado por la Comisión Europea, las Naciones Unidas y el Banco mundial, estuvo a cargo de Jacobo Pombo García, Presidente del GYLF 2021, quien felicitó al Consejo por la contribución de la organización al desarrollo de México y señaló la importancia de congregar en el evento a líderes jóvenes con responsabilidades públicas a lo largo y ancho del mundo.
POR ALEJANDRA CERECEDO CONSTANTINO
ASESORA EN EL SENADO DE LA REPÚBLICA
SSB