MALOS MODOS

CELAC: La gestación de una victoria histórica

Estoy pensando poner la cereza al pastel con una clase de historia para todos los dignatarios, después del encuentro

OPINIÓN

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Julio Patán / Malos Modos / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

Es muy importante este encuentro, porque significa consagrar a la Cuarta Transformación como un fenómeno internacional, y a mí como líder latinoamericano. Así que es muy importante hacerle sentir a nuestros invitados, de entrada, toda la tradición de la hospitalidad mexicana. Que se sientan rebién tratados. Tenemos que consentirlos; hacer de esta una ocasión inolvidable. Porque mi liderazgo es incuestionable, pero los enemigos acechan. No podemos confiarnos.

Lo tengo todo planeado. Para empezar, un discurso de bienvenida de Beatriz. Es muy importante que te extiendas, mi amor. Háblales de historia. Pero mucho: 15, 20 minutos. Agasájalos con anécdotas que, del Palacio Nacional, que de los héroes patrios, que de las culturas prehispánicas. ¿Cómo? Ah, claro. Métele poesía. Aprovecha ese talento.

También puede ser buena idea que señales con las manos al norte, sur, etcétera, para indicar que de dónde venían las tropas, que dónde estaban los vestigios mexicas. Le da naturalidad al discurso. Nada más te pediría que subrayes que el hecho de que el Presidente viva en un palacio es el símbolo de que al fin llegó la democracia.

No prometo nada, pero estoy pensando poner la cereza al pastel con una clase de historia para todos los dignatarios, después del encuentro. Igual les cuento lo de Juárez y Mussolini, o lo de “Tan lejos de Dios…” Ya ven que le encanta a todo mundo. ¿Se acuerdan de cuánto se rio Kabala con eso? ¿Cómo dices, Marcelo? ¿Que es mi “pies de resitans”? Sabes que no hablo inglés, pero gracias.

Bueno, a esas alturas ya los vamos a tener en el bolsillo, más aun con los tamales y el agua de jamaica. Humberto, sí pidieron de chipilín, ¿verdad? De todas maneras, ahí va a llegarles la sorpresota. Todo mundo está impresionado con la visita de Díaz-Canel, ¿no? Pues agárrense. ¿Saben quien va a aparecer de último momento? ¿No adivinan? No, Ortega no, aunque estaría muy bien. ¡Nico Maduro! No es por nada, pero ¡chispas!: qué convocatoria tengo. No cualquiera arma una CELAC así, y además sin gastar y en 24 horas.

Nos queda definir algo importante: el regalo para los invitados. Se me ocurre un paquete con un ejemplar de A mitad del camino, un casete de Eugenia y Beatriz, una camiseta de los Pericos de Palenque y una reproducción de la pirámide del Zócalo. Marcelo: infórmale a Brasil, Colombia y Chile que vamos a dar esos presentes, a ver si cambian de opinión y vienen. Los ejemplares van a estar firmados, ¿eh? A propósito, ¿ya confirmó Alberto? ¿Eh? ¿Que manda a su canciller? Entiendo. Está muy difícil la cosa por allá. Igual es una buena noticia.

Eso significa que ya amarramos el respaldo de Argentina. Ni modo que corran al
representante antes de que llegue, ¿verdad? ¡Jajaja!

Bueno, esta ocasión histórica amerita unas tlayudas para festejar.

Los dejo.

POR JULIO PATÁN
JULIOPATAN0909@GMAIL.COM 
@JULIOPATAN09

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