COLUMNA INVITADA

El fracaso de la política social de combate a la pobreza

Somos uno de los pocos países que no generó programas económicos de rescate a nivel federal, tras la pandemia

OPINIÓN

·
Juan Carlos Romero Hicks/ Colaborador/ Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: FOTO: Especial

México atraviesa por cinco crisis simultáneas que marcan nuestro presente y demandan atención inmediata.

La más profunda, la pérdida de valores y de confianza en las instituciones.

La más grave: la crisis de violencia y seguridad.

La más irritante: la corrupción acompañada de la impunidad.

La antidemocracia: el asalto de las instituciones; congresos locales, ayuntamientos, gubernaturas, Congreso de la Unión e instituciones autónomas.

Y la crisis crónica; la pobreza y la desigualdad, así como una economía que no redistribuye el ingreso, no apoya la economía social y acentúa carencias como educación, salud, alimentación, seguridad social, vivienda y servicios.

La medición de pobreza tanto del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), como del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) revelan que entre 2018 y 2020 la pobreza aumentó de 41.9 por ciento a 43.9 por ciento; pasamos de 51.9 a 55.7 millones de personas en pobreza; es decir representó un aumento de 3.8 millones de mexicanos.

La pobreza extrema se incrementó de 7 por ciento a 8.5 por ciento, alcanzando 10.8 millones de personas; es decir 2.1 millones más que en 2018.

Y la población con ingreso inferior a línea de pobreza creció de 49.9 por ciento a 52.8 por ciento.

Aunado a lo anterior, considerado en números absolutos, los factores que se miden indican que los rezagos son en los rubros más sensibles de la actualidad, como el de educación o acceso a los servicios de salud.

Se estima que 35.7 millones de personas no cuentan con cobertura de salud alguna y sólo entre 2018 y 2020 se sumaron 15.6 millones.

Esto se debe principalmente a la eliminación del Seguro Popular que impuso Morena meses antes de que iniciara la pandemia.

El fracaso de la política social de combate a la pobreza es evidente en los totales, pero es una realidad que alcanza a toda la población, ya que el ingreso corriente total per cápita disminuyó 6.9 por ciento y la inflación anual, hasta los registros de junio, sumó 5.75 por ciento.

No cabe duda de que la pandemia ha afectado negativamente a México y a todo el mundo.

Sus consecuencias siguen contándose en vidas y en saldos económicos.

Sin embargo, es importante reconocer que el aumento en la pobreza se debe centralmente al mal manejo de la pandemia y a la falta de políticas públicas para responder a la crisis.

Somos uno de los pocos países que no generó programas económicos de rescate a nivel federal y podemos ver las consecuencias.

Es urgente que este gobierno entienda que sólo trabajando unidos podremos salir de las crisis que vivimos.

Su ineptitud y su incapacidad para generar soluciones sigue generando dolor y pobreza.

POR JUAN CARLOS ROMERO HICKS
COORDINADOR DEL GRUPO PARLAMENTARIO DEL PAN
@JCROMEROHICKS

dza