COLUMNA INVITADA

Revocación del mandato

Como la oposición está derrotada, ahora descalifica esta herramienta, y dice que no tiene sentido realizarla

OPINIÓN

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Gerardo Fernández Noroña/Colaborador/ Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

1. El pueblo pone, el pueblo quita. Ninguna retórica, ninguna demagogia. Hasta antes de nuestro gobierno, no había manera de librarte de un presidente de la República corrupto, asesino, delincuente electoral, vendepatrias.

 2. A partir de la llegada del compañero presidente López Obrador, a la máxima responsabilidad política de la nación, y como parte de los compromisos de campaña, envió una reforma constitucional para establecer la revocación del mandato.

 3. El compañero presidente fue más lejos, pues no sólo estableció la posibilidad de revocar el mandato a un presidente, sino en su caso, omitió toda petición ciudadana para la realización de la misma.

 4. Su intención, fue que en las elecciones intermedias de 2021, en que se renovó la totalidad de la Cámara de Diputados, se eligieron 15 gobernadores, todos los congresos locales y un número muy grande de alcaldías, en esa misma fecha, se le preguntaría a la ciudadanía si quería revocar el mandato al compañero presidente.

 5. La oposición, desquiciada como siempre, dijo que el presidente se quería reelegir. En la Cámara de Diputados, aprobamos que la revocación fuese en las elecciones federales de 2021, pero el Senado se opuso.

 6. Como se necesita mayoría calificada para una reforma constitucional, los senadores de oposición, se negaron a que la revocación fuese en 2021 y la mandaron hasta marzo de 2022.

 7. La revocación del mandato es una herramienta democrática poderosísima. Si la oposición fuese fuerte, podría, simplemente convenciendo a la ciudadanía, deponer al actual gobierno.

 8. Pero como la oposición está derrotada, ahora descalifica la revocación, y aún va más lejos, planteando que no tiene sentido realizarla.

 9. Nosotros no debemos confiarnos, debemos construir comités municipales de apoyo al compañero presidente y, apostar a lograr una amplísima votación en el sentido de que López Obrador termine su mandato en octubre de 2024.

 10. Idealmente, deberíamos conseguir en marzo de 2022, más de 30 millones de votos en su apoyo. Es un reto fuerte y es la última aduana importante antes del 2023, en que el movimiento debe elegir la candidatura que sea el relevo del compañero presidente. Requerimos de unidad, mucha unidad y politización y más politización de nuestro pueblo, para seguir siendo una revolución sin violencia, triunfante. Lo anterior, respaldado de un poderoso trabajo con la gente, cotidiano tenaz y permanente.

POR GERARDO FERNÁNDEZ NOROÑA
COLABORADOR
@FERNANDEZNORONA

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