Las lecciones aprendidas por Andrés Manuel López Obrador luego de la consulta sobre los “actores políticos del pasado” hicieron que metiera presión, otra vez, a los legisladores. El presidente se mostró decepcionado porque no se haya discutido la ley reglamentaria de la revocación de mandato.
El tiempo apremia, porque la fecha marcada para la nueva consulta a la población es el 21 de marzo, aunque podría moverse a un domingo cercano posterior. El regaño presidencial hizo que el coordinador de Morena en el senado, Ricardo Monreal, convocara a los legisladores de otras fuerzas políticas para intentar llamar a un nuevo periodo extraordinario para discutir la ley pendiente, pero no logró consensos.
Tanto PRI como PAN y Movimiento Ciudadano dijeron no a discutirla al vapor. Sin embargo, no se trata de una negativa definitiva. El presidente tendrá su ley y su consulta. De manera general, el artículo 35 de la Constitución ya esboza generalidades para la celebración de la revocación de mandato, pero faltan las reglas del juego.
Están pendientes temas como las prohibiciones al uso de recursos públicos para su difusión, la contratación de tiempo en radio y televisión con ese propósito y la prohibición a la propaganda gubernamental para promover el ejercicio. La recolección de firmas para activar el recurso puede comenzar en noviembre.
Se requieren 2 millones 800 mil. Es factible que la convocatoria se lance en el mes de enero. Pero antes de cumplir estos lineamientos, se necesitan recursos. El gobierno federal debe dar al Instituto Nacional Electoral el dinero para poder organizar la consulta. A la fecha no hay un cálculo exacto del costo.
Los cálculos rondan en los mil doscientos millones de pesos. Si el presidente desea que se lleve a cabo, debe instruir al secretario de Hacienda Rogelio Ramírez de la O que incluya en el proyecto de presupuesto esta cantidad. Otro punto es la pregunta. Cuatro grupos parlamentarios han presentado propuestas.
La más reciente es la de Ricardo Monreal que plantea: ¿Está de acuerdo en que el presidente de la República electo para el periodo constitucional en curso continúe en el cargo hasta que concluya su mandato? Las respuestas serían sí o no. Las preguntas propuestas por el PAN y el PRI incluyen el término “por pérdida de confianza” lo que anticipa un jaloneo más entre las fuerzas políticas.
Aún así, lo más factible es que para mediados de septiembre quede la ley reglamentaria. La oposición no tiene empacho en darle a AMLO su consulta, lo que le permitirá estar en su estado favorito de campaña permanente.
Que se cumplan los requisitos para convertirla en vinculante (participación del 40 por ciento del padrón)
POR CARLOS ZUÑIGA PÉREZ
@CARLOSZUP
MAAZ