Este lunes se presentaron formalmente los equipos de entrega-recepción para una transición pacífica y ordenada en el Poder Ejecutivo estatal, rumbo a la toma de posesión del próximo 12 de septiembre. Por su parte, las y los diputados harán lo propio el 7 de septiembre, y los ayuntamientos entrarán en funciones el 15 de septiembre de este año. En dos meses arrancará una nueva era en el servicio público del estado, que tiene grandes retos y expectativas por parte de la ciudadanía.
El tiempo de transición es fundamental para quienes ocuparemos los cargos durante los próximos años, ya que nos permite conocer, de primera mano, el estado que guardan las oficinas, el personal, los planes, los proyectos y todo lo relativo al ejercicio de nuestras funciones. Con la experiencia adquirida durante mi paso por la administración pública federal centralizada, conozco los mecanismos que deben llevarse a cabo, para reorganizar al personal, sin perder eficacia en el despacho de los asuntos de nuestra competencia, ya que será fundamental un nuevo esquema de trabajo.
Asimismo, el trabajo cercano con quienes integren la próxima legislatura local será clave para llevar a cabo las reformas que resulten necesarias para instaurar la austeridad y el combate a la corrupción, como políticas transversales de todas las oficinas de gobierno, para comenzar a sanear las finanzas del estado y reconstruir el tejido social, resquebrajado entre las autoridades y la ciudadanía.
Con los municipios también habrá una mayor cercanía, para coadyuvar en el cumplimiento de las respectivas obligaciones constitucionales, impuestas para el gobierno de la entidad y para los gobiernos municipales, con especial atención a aquellos en los que existan altos índices de violencia, migración, pobreza, falta de acceso a los servicios públicos y con mayores carencias en la vivienda, con el objetivo fundamental de elevar el nivel medio de calidad de vida, incluso en las zonas más alejadas.
Los trabajos ya comenzaron. Desde antes de la jornada electoral, fue prioridad crear una amplia base de datos estadísticos, como un diagnóstico de la situación en los distintos sectores que conforman nuestra compleja sociedad, lo que nos permitió establecer prioridades, que quedarán plasmadas en el Plan Estatal de Desarrollo, en consonancia con el Plan Nacional de Desarrollo, surgido del histórico 2018.
Más allá de las complejidades técnicas y operativas de los retos que nos esperan en la próxima administración, la voluntad de cumplir con nuestras obligaciones como servidores y servidoras públicas, emanados del mayor movimiento social en México de los últimos años, nos permitirá comenzar a sentar las bases de un cambio profundo en nuestra vida pública.
Como gobernador electo de Zacatecas, es imprescindible comenzar a trabajar desde el primer minuto, luego de la toma de posesión, en coordinación con las autoridades municipales y con la federación. Confío en que con colaboración y trabajo arduo daremos buenos resultados al pueblo de Zacatecas, que nos confió tan alta responsabilidad.
DAVID MONREAL
COLABORADOR
@DAVIDMONREALA
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