En la semana me vino de momento un lapsus de felicidad, al leer un comunicado que emitieron a través de sus redes sociales los Tigres de Quintana Roo, en donde anunciaban que el 18 de julio sería el último juego como local en el Estadio Beto Ávila, debido al comienzo de una remodelación total del inmueble al que, por cierto, muy buena falta le hace.
La felicidad fue al suponer que la Ciudad de México podría ser la sede perfecta para que el conjunto de bengala jugara como local los juegos restantes de la actual temporada; total, el estadio Fray Nano está a la orden para recibir pelota profesional. Sin embargo, parece ser que será el estadio Kukulkán, casa de los Leones de Yucatán, donde los Tigres terminen la temporada en casa, y se entiende por la cercanía y los costos de traslado.
Aunque al final de cuentas, el anuncio de la remodelación, supone el no mover por al menos un buen tiempo al equipo de Quintana Roo. Y es que hay que recordar que hace algunos meses, la directiva felina hacía oficial la salida de Tigres de Cancún, especulando en la afición un posible retorno a la capital y más fuerte aún, su mudanza a tierras sonorenses. Ojalá la remoción sea digna de uno de los equipos más grandes de México.
LAS ESTRELLAS
A pesar de muchas críticas que generaron los uniformes utilizados en el Juego de Estrellas 2021 de la Major League Baseball (MLB), lo verdaderamente importante fue el juego, que a mi parecer tuvo sus momentos de destello y, sobre todo, el lucimiento de figuras que en un futuro seguramente ocuparán un lugar en el Salón de la Fama.
El MVP fue para Vladimir Guerrero Jr., quien ya forma parte de una dinastía como en su momento lo fueron los Griffey. Vaya clase de pelotero que habrá que seguir de cerca, porque es de una generación por demás interesante de elementos hijos de leyendas.
WATCH PARTY
La MLB se voló nuevamente la barda con la activación que realizaron para ver el Home Run Derby: Watch Party, que tuvo lugar en cuatro ciudades del país y donde los aficionados, desde nuestros autos, pudimos disfrutar de este espectáculo acompañados de buena comida, bebida y ambiente. Muchas felicidades a la MLB México y ojalá sigan con estos ejercicios que abonan a la
sana convivencia y la difusión del deporte rey en el mundo.
POR MANUEL ZAMACONA
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MAAZ